Hace unos días Nintendo nos sorprendió con un vistazo a detalle de la jugabilidad de The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom. Una de las secuelas más esperadas de los últimos años. Si bien mostró mecánicas muy interesantes, que agradaron a muchos fans, inmediatamente surgieron las quejas. Ya que algunos grupos comenzaron a decir que parecía más un DLC que un nuevo juego.
Ante la aparición de cada vez más comentarios similares nos pusimos a analizar si una secuela debería traer cambios considerables o si está bien que simplemente nos dé un poco más de aquello que nos encantó.
Las secuelas deben continuar lo que ya se estableció
¿Cuál es la finalidad de las secuelas? El diccionario lo define como una obra que continúa una historia ya desarrollada en una anterior. En palabras más simples, se trata de un trabajo que nos da más de lo mismo. A menudo porque el público quedó tan encantado con lo que vino antes, que no pueden esperar a obtener más.
Así que Tears of the Kingdom está cumpliendo con esto. Mantiene la jugabilidad de Breath of the Wild y su bello mundo, pero al mismo tiempo añade nuevas mecánicas de juego y nuevas zonas en los cielos.
En cuanto a la historia aún tenemos muy poca información. Sin embargo, algunos trailers ya dan a entender que seguirá la odisea de Link y la Princesa Zelda por rescatar a Hyrule, aunque esta vez se cierne una nueva amenaza sobre esta tierra. Si ya está cumpliendo con lo que las secuelas deben ser, entonces ¿De dónde vienen las quejas? ¿No estaban impacientes por volver a un enorme mundo abierto controlando a Link?
Estos comentarios llevan años popularizándose
Cabe destacar que esta situación no es algo exclusivo de Zelda. Hace unos años aparecieron quejas similares con los trailers de God of War Ragnarok. En ese entonces muchos usuarios de redes comenzaron a decir exactamente lo mismo. Que se trataba de un DLC y que los que estaban emocionados eran unos conformistas.
Sin embargo, God of War Ragnarok llegó para convertirse en uno de los videojuegos más premiados de 2022. Todo porque expandió de una manera excelente los sistemas de su antecesor. Sin mencionar que nos dio la esperada conclusión del viaje de Kratos y Atreus por tierras nórdicas. Incluso después de llevarnos a visitar varios de los mismos escenarios del título anterior. Así que cumplió cabalmente la tarea de las secuelas.
Las secuelas sí deben venir con cambios, pero no tan bruscos
Claro que los cambios y mejoras en una secuela son bienvenidas. Sin embargo deben implementarse de tal forma que no contradigan lo que llegó antes. De otra manera puede desaparecer todo lo que amamos. Después de todo también hemos tenido algunas secuelas que cambiaron por completo su jugabilidad. Lo cual ha tenido resultados mixtos.
Tomemos de ejemplo a Resident Evil que ya ha tenido un par de cambios importantes en sus secuelas. Si bien se adaptaron a los tiempos y lograron éxitos comerciales, los fans no siempre salieron tan contentos. Resident Evil 4 dejó atrás la cámara fija y decidió centrarse en la acción. Años después Resident Evil 7 optó por una nueva perspectiva en primera persona que además regresó al horror. Pero pregunten a los fans su opinión sobre estas decisiones y se arma una batalla campal.
También tenemos el otro lado. Cuando una secuela cambia tanto que los elementos que fueron tan queridos se abandonan y quedan simples referencias de lo que fue. ¿Recuerdan Crash of the Titans?
Esto incluso ha dado origen a nuevas franquicias. De hecho Devil May Cry originalmente nació como una secuela de Resident Evil. También Ghostwire Tokyo se originó como una secuela de The Evil Within 2. Sin embargo sus desarrolladores sintieron que eran tan diferentes que optaron por hacerla una propiedad intelectual totalmente aparte en lugar de secuelas. Con el fin de no afectar a la franquicia ni alejarse mucho de ella.
Nos parece que esta discusión sólo surgió para molestar
Si las personas que se quejan quieren un videojuego que revolucione la industria, entonces quizás no deberían estar buscando esto en secuelas. Más bien deberían darle una oportunidad a nuevas propiedades intelectuales, que precisamente están hallando la forma de diferenciarse y ganarse su puesto en el mercado.
Las secuelas se hacen para mantener a los fans volviendo por más. Halo es un FPS donde simplemente vamos enfrentando a aliens, aunque en diferentes escenarios. Gears of War es ir avanzando y cubriéndonos en tiroteos, con muy pocas variaciones en sus fórmulas. Aún así amamos estas franquicias y lograron un gran éxito.
A nuestro parecer estas quejas de que ciertas secuelas son DLC, son hechas por personas que simplemente quieren ofender por un extraño complejo de superioridad. Pero la realidad es que una secuela no tiene que ser un parteaguas en la industria para ser divertida y cautivar al público.
Además, estamos seguros que quienes emiten esta clase de comentarios son los mismos que cada año compran el mismo juego de fútbol con un número diferente. No tenemos pruebas, pero tampoco dudas.
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