No hay duda de que ser streamer es una de las actividades más lucrativas de la actualidad si sabes posicionarte y lograrlo, sin embargo existen muchas dudas de cuál es la mejor plataforma para hacerlo, teniendo a la mano Twitch, YouTube o hasta Facebook. Aquí revisaremos cuál es la mejor para hacerlo y qué necesitas para poder tener mejores opciones para stremear en 2022 y 2023.
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Durante 2022, muchos streamers grandes han hecho movimientos importantes en las plataformas, que también han cambiado sus formas de trabajar y pagar. Twitch bajó las cuotas de pago a los streamers en general, así como el precio de las suscripciones, haciéndolo menos lucrativo; por su parte, YouTube es una plataforma sumamente restrictiva, lo que hace que sea mucho menos atractiva para cualquier streamer.
Sin embargo, parece que todo está tomando forma nuevamente, y esto es lo que se puede aprovechar de las dos plataformas que tienen más streamers grandes.
Descubrimiento y comunidad
A pesar de lo que se pueda decir al respecto, los streamers solo pueden vivir gracias a dos cosas esenciales: el descubrimiento y la comunidad que formen. Esto, evidentemente, es más complicado de lo que esas dos simples palabras pueden decirnos y tienen más que ver con el personaje en cuestión, que con la plataforma en sí.
Sin embargo, estas dos manejan ambos aspectos de manera diferente y pueden favorecerte o desfavorcerte según los tomes en cuenta de la manera en que lo hacen, pues esto impactará fuertemente las aspiraciones que tengas tanto para la gente que te sigue como para el contenido que estés creando.
Por un lado, Twitch es la plataforma que ha estado enfocada al streaming de videojuegos durante más tiempo. Aquí, el origen del todo tiene esa forma, por lo que sigue teniendo esa misma naturaleza a pesar de los cambios y de que la cantidad y capacidad de contenido que se crea es cada vez más variada.
Por otro lado, YouTube tiene como plataforma una historia mucho más larga, pero sus streams son mucho más nuevos, por lo mismo las comunidades dedicadas a ello sufren de la misma novedad, privilegiando a aquellos que llevan más tiempo dentro de la plataforma, sea haciendo streams o no.
Las diferencias son claras, y en el sentido de descubrimiento es mucho más fácil figurar en Twitch, al ser más proclive a ser descubierto. Asimismo, las comunidades que se pueden crear aquí son mucho más activas que en YouTube, por la volatilidad del contenido, entre shorts, videos on demand y el streaming, sin contar los servicios de renta de contenidos, así como música.
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YouTube privilegia las comunidades grandes, tanto para el descubrimiento como para la reproducción de los streams en vivo. Esto implica que un canal con muchos más suscriptores tendrá siempre preponderancia sobre ti, lo que te hace un competidor mucho más débil si es que tu comunidad es pequeña o comienza a penas.
Sin embargo, la variedad del contenido que se hace dentro de YouTube tiene una capacidad de ser descubierta con el tiempo mucho mayor, a diferencia de Twitch que implica pasos extras para el usuario si es que este quiere acceder a contenido antiguo.
Contenido y libertad de uso
El copyright es un enemigo natural de la creación de contenido y en cuanto a videojuegos estos han tenido varios episodios penosos con las regulaciones de derechos de autor. Actualmente, la pelea sigue en pie por la forma en que se utiliza en Internet y tanto Twitch como YouTube han presentado sus posturas al respecto.
Twitch permite que durante los streams se reproduzcan contenidos etiquetados con restricciones de copyright siempre que estas no se queden guardadas en los VOD. No obstante, una penalización en vivo puede ser aplicada si los dueños de los derechos lo introducen como un reclamo.
En el otro lado, YouTube no permite absolutamente nada de contenido etiquetado con protección de copyright, haciendo que cualquier stream sea baneable de manera automática a través de los algoritmos de identificación de contenido. Con esto, se pueden desmonetizar los streams o en caso de acumular faltas, cerrar el canal por completo.
Esto quiere decir que también la forma en que tu stream se realice será muy importante la toma de decisión de la plataforma en donde elijas stremear. Esto implica que tengas un mucho mayor cuidado en cómo se reproducen tus directos en pantalla, limitando canciones en videojuegos o quitando partes de las cosas que quieras presentar a tu audiencia.
Monetización
Ambos cuentan con el mismo sistema de monetización que parece estar estandarizado aunque no exista ningún tipo de regulación al respecto. Las formas de monetizar el contenido son las siguientes:
- Publicidad pactada con marcas
- Anuncios in stream
- Posicionamiento de producto
- Vistas de VOD
- Subscripciones
- Donaciones
Estas funciones no están activas para todos, así que tendrás que cumplir con los requerimientos de cada plataforma para ello. Twitch y YouTube ofrecen contratos que estipulan el nivel de ganancias, que se miden en porcentajes. En este caso, YouTube ofrece una mejor distribución para el creador de contenido, al estar regulada por los estándares de Google AdSense, mientras que Twitch tiene porcentajes variados según el tipo de beneficio que obtiene de cada uno.
Twitch o YouTube, qué plataforma es mejor
En corto, Twitch es una mejor plataforma para comenzar a stremear de manera inmediata. Ofrece mejores herramientas para la creación de contenido y, sobre todo, establece una forma de progresión mucho más clara y que responde al nivel de impacto que tiene el streamer.
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Sin embargo, para las grandes comunidades puede que YouTube sea una mucho mejor opción, teniendo en cuenta lo restrictiva que puede ser pero también lo lucrativa que es al tener una cantidad de usuarios mucho mayor y la forma en que da beneficios posteriores al stream.
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