De alguna manera, Super Mario RPG fue una especie de parteaguas para toda una generación de consumidores de videojuegos. Ya estaba establecido el PlayStation pero estabas más preocupado por seguir con tu SNES, ya se hablaba de los gráficos en 3D, pero tu seguías en 2D. Pensabas que Silicon Graphics era exclusivo del “Ultra 64” y el “Super” todavía te daba joyas.
La vez que Squaresoft (ahora Square Enix) y Nintendo se dieron la mano para crear lo que hoy conocemos como Super Mario RPG tal vez no dimensionaban el grado de popularidad que iba a tener el juego o más o menos esperaban que fuera ese camino que le ayudaría a mucha gente a ingresar a un género que – para ese entonces – parecía imposible.
Lo que sí fue una realidad es que este juego donde Mario hizo toda clase sociedades para recuperar estrellas se quedó en la mente de millones de jugadores. Fue tal la popularidad que tener un cartucho con caja – o incluso sellado – significó un alto grado de coleccionismo que se veía eclipsado por todos esos cartuchos japoneses cuidados a la perfección que circulan por el mundo a precios moderados.
Así como muchos le exigieron a Square Enix hacer un remake de Final Fantasy con gráficos modernos, a Nintendo le suplicaban por el regreso de este videojuego que parecía se quedaría atorado en un ROM de la Consola Virtual de una consola vieja o en el servicio de Nintendo Switch Online. Unos días después de publicada esta reseña, el juego estará otra vez en tiendas y como cuando Bart veía esa revista afuera de la tienda de historietas diré: “Anoche soñé que te tenía entre mis brazos” y agregaré “y ahora estás aquí”.
Super Mario RPG punto por punto
Volver al lugar que te hizo feliz
Muchas de las personas que adquieren los viejos juegos de Nintendo en una Consola Virtual o en la eShop del Nintendo Switch lo hacen porque quieren volver a revivir viejas y entretenidas glorías. En realidad lo que desean esas personas es volver a ese punto de la historia en que fueron felices y la complejidad no era tanta; le soplabas (erróneamente) a un cartucho, lo colocabas en la consola y disfrutabas en un pequeño televisor de un videojuego.
Super Mario RPG es de la época en que los videojuegos lejos de ser pretenciosos apostaban por divertirte. Y aquellos que intentaban que pecaban de complejos, simplemente se quedaban escondidos en una especie de nicho del cual no se podía escapar. Muchos RPG pasaron por eso, incluso Final Fantasy VI, a pesar de su popularidad, tenía una narrativa muy pesada donde el villano principal te dejaba con ganas de más.
En el caso de Super Mario RPG tenemos la premisa sencilla donde Mario se encamina en la misión de salvar de nueva cuenta a la Princesa Peach. Podríamos decir que para la década de los 90’s, rescatar a su alteza del Reino Champiñón aún no se volvía en una tarea frecuenta, pero ya apuntaba a que sería un “tropo” del que no se puede escapar.
La cuestión aquí es que en vez de ir por la experiencia plataformera, te postrabas en un escenario con una vista isométrica – limitada por la tecnología de la época – y una presentación con personajes modelados en 3D. Las mecánicas de juego eran las de un RPG muy básico. Traerlo de vuelta – a manera de capricho de un sector muy nostálgico – suena a una idea muy básica, pero que en su ejecución, resulta muy entretenida y única. Llevarlo a Nintendo Switch fue lo correcto.
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Aprendes lo más básico de un RPG
Super Mario RPG es en su concepto más básico adaptar la premisa que siempre ha acompañado a Mario a lo largo de todos sus juegos – o al menos los que habían salido en la década de los 90’s y posterior – en un título de rol con una progresión muy sencilla y parámetros que podrías encontrar en la partida más simplificada de Dungeons and Dragons.
El deber de Super Mario RPG era abrir las puertas de un género a la mayor cantidad de personas. No es que Dragon Quest o Final Fantasy fueran mucho más complejos, solo digamos que las historias tenían narrativas más pesadas – por no decir cansadas – y lo que ofrecía el título de Nintendo con Squaresoft era mucho más ágil.
Hay dos cuestiones clave que debes aprender con este juego: el combate que engloba todos los elementos estratégicos y la progresión. En un juego por turnos los duelos son pausados y la elección de comandos es clave. Aquí tienes la opción de atacar, usar ítems, defender y usar movimientos especiales. Estos últimos son “las magias” de los distintos protagonistas de este título. La variable más complicada de manejar es la de los puntos que se gastan al realizar esos movimientos especiales.
Lo bueno y malo de Super Mario RPG es que los puntos flor son compartidos por todos los personajes y te los puedes acabar rápido con, por ejemplo, 3 súper saltos y se acabó. Parece un elemento injusto, pero aprendiendo a abordarlo y administrarlo, tienes una experiencia muy entretenida en todos los duelos contra la amenaza que invadió el Reino Champiñón. Ahora, la progresión es muy sencilla porque obtienes puntos de experiencia con cada combate, la cuestión es que, con cada subida de nivel tienes la opción de elegir si quieres aumentar tus puntos de salud, ataque o de magia. Suena muy simple, pero debes saber elegir para que tus personajes funcionen de la forma correcta.
Super Mario RPG a veces era simple y en otras muy pretencioso
Como te lo comentamos, Super Mario RPG es un punto de partida para los que se querían acercar al género de los videojuegos RPG. Tenías una historia divertida y fácil de seguir, varios acertijos que superar en los distintos niveles, ahorrar el dinero suficiente para comprar ítems y mejorar los atuendos de tus personas y demás.
Incluso su sistema de combate era tan sencillo como el de los primeros Dragon Quest que salieron en el SNES y su interfaz gráfica era lo que sigue de amigable pues cuadraba con los colores de la consola de aquel entonces. Todo eso ya era muy simple, trasladarlo al Nintendo Switch pues solo sería darle algunos retoques estéticos para que se sienta rejuvenecido. Lo que vemos en la actual consola de Nintendo es llevar todo lo que servía de aquel título a una generación y ejecutarlo de la manera más eficiente.
Para que Super Mario RPG se sintiera mucho más complejo o digamos más complicado, contaba con muchos duelos retadores y algunos niveles en los que te podías perder muy fácilmente. Ahí es donde la experiencia se sentía muy propositiva y, de alguna manera, el resultado era satisfactorio para la audiencia que se adentraba en el género por primera vez.
Por que la magia de un RPG no solo está en subir de nivel y tomar las mejores decisiones – que aquí no tenían la mayor repercusión – era más bien ejecutar el mejor plan posible para encontrar la debilidad de un enemigo complicado y así simplificar un duelo que en vez de que se extienda mucho, dure poco gracias a que encontraste el mejor camino para superar los obstáculos. Todas esas enseñanzas parecen obsoletas en esta época, más de 27 años más tarde.
Sí, así se veía de simple
Si jugaste la versión de Super Nintendo, Super Mario RPG en Nintendo Switch te parecerá una especie un largo familiar que no realizabas en mucho tiempo. El camino es el mismo, solo que los paisajes evolucionaron o podríamos decir que mejoraron. A lo que quiero llegar es que todo te resultará tan extremadamente familiar que terminarás volteando a ver cómo era el camino original.
Si comparas una versión contra otra te das cuenta de que la base sigue intacta, solo los objetos fueron los que cambiaron. Desde los acabados de los materiales de cada uno de los objetos hasta los mismos personajes se sienten igual, pero en el fondo lucen perfectos para reflejar todos los avances visuales que ahora tienen los videojuegos. Sí, aún tienes espacios en negro cuando estás explorando escenarios, pero digamos que esa es parte de la experiencia.
Entonces, ¿es un remake o un remaster? ¿Qué rayos es? Se ve que el juego fue hecho desde cero. De eso no cabe la menor duda. Pero el respeto al esqueleto original está presente. Es como con los remasters de los videojuegos de Crash Bandicoot o Spyro: The Dragon, donde o se ajustaron gráficos en alta definición o hubo piezas que de plano fueron creadas desde cero siendo fieles al material original.
Mientras juegas Super Mario RPG en tu Nintendo Switch te das cuenta de que de verdad estás reviviendo algo que era muy simple (tal vez por culpa de la tecnología de la época), pero a la vez muy funcional y que solo querías verlo un poco más modernizado. Incluso agradeces que una de las mejoras en la calidad de vida del juego está en que tengas un guardado instantáneo o que el juego está localizado a más de tres idiomas.
Animaciones llenas de fan service
Lo que sucede con Super Mario RPG te recordará un poco a lo que fue el fenómeno por el que pasó Chrono Trigger cuando dio el salto al PlayStation y al Nintendo DS. Para aquel entonces a lo que más aspirabas era a añadidos especiales porque en lo visual no le iban a meter mucha mano. No, lo que tuvo ese legendario videojuego eran unas notables animaciones que te dejaban con la boca abierta.
Sí, eran animaciones muy dignas las que gozaba Chrono Trigger en el PlayStation con los diseños de Akira Toriyama en todo su esplendor. Lo que ofrece Super Mario RPG es ligeramente parecido, porque en los momentos más destacados de la narrativa de este título en Nintendo Switch gozamos de animaciones realmente entretenidas que aderezan la ya sencilla historia. Si a eso añadimos cómo se ven los movimientos especiales que realizan los personajes en conjunto, contamos con un fan service aplaudible y disfrutable.
Lo mejor de todo es que el fan service está presente en las cantidades correctas, porque la sobre exposición de estas solo causaría irritabilidad en la experiencia de juego o simplemente se perdería la identidad del producto original y nadie quería eso. El chiste es que el juego volviera a verse bonito, con una presentación disfrutable, si quieres, también perdurable y que también te haga reflexionar con lo que puede pasar con otros videojuegos.
De seguro muchos dirán que regresar a las ideas de antaño es contraproducente para los videojuegos pues las nuevas ideas quedan ocultas, sin embargo, cuando tienes un buen producto en tus manos y la audiencia lo siente, simplemente no puedes echar marcha atrás, así son los asuntos de los videojuegos que terminan involucrando negocios y resultados.
La presentación es sobresaliente, la ejecución podría ser mejor
El precedente directo que tenemos de un remake/remaster instantáneo de un videojuego de más de 25 años de Nintendo fue The Legend of Zelda: Link’s Awakening. Si bien la presentación visual y todos los detalles con los que rejuvenecía el concepto original funcionaban a la perfección, en la realidad, en su ejecución, se presentaban muchos errores que si bien no son flagrantes o escandalosos, están ahí.
Se supone que el desarrollo de videojuegos ha avanzado lo suficiente, tanto en herramientas para crear como en ideas para sortear obstáculos. Si esto es así, ¿por qué hay caídas innecesarias o luego se siente que el juego se traba? Hago hincapié en que esto no es un mal que rompa la experiencia como llega a suceder con Pokémon Scarlet y Violet, pero si te preguntas por qué en un título tan compacto – porque eso es – no se puede tener algo excelente.
El chiste no es precisamente contar con un título perfecto, porque no existe, más en esta época, pero parece que no se logran superar ciertos baches que se siguen presentando cuando tienes una consola lo suficientemente capaz y herramientas de software que mejoran el desarrollo de los programadores.
Sí se vale ser exigentes con Nintendo, porque ellos hacen grandes trabajos de desarrollo, pero cuando se trata de revivir algunas experiencias de hace mucho tiempo, te preguntas por que se presentan ciertos errores que pueden ser sorteables. Ojo, no son problemas que rompan al juego o vuelvan la experiencia injugable, pero podrían no estar y hacer la vida mejor para el ojo más exigente.
¿Deberías comprar Super Mario RPG?
Discutir sobre la comprobada calidad de Super Mario RPG es un ejercicio muy ocioso. Charlar acerca de un remake de un videojuego que más o menos envejeció bien también, porque platicamos acerca del tema una y otra vez durante muchos años. El debate debe seguir más sobre si la existencia de este producto es para atender a un público consumidor de nostalgia en distintas opciones de entretenimiento: videojuegos, música, series de televisión o es la falta de originalidad en las obras más recientes la que provoca estas producciones.
Jugar Super Mario RPG es el claro ejemplo de que quieres volver a los lugares o momentos en los que fuiste feliz. El sueño que los fans tanto idealizaron en sus mentes por fin es una realidad, la cual resulta ser muy placentera. La música es notable, las mecánicas de juego no requirieron mayores ajustes y la experiencia en general cumple cabalmente con su cometido. Claro, tal vez sea un juego demasiado simple para nuestra época, pero en su momento fue la puerta de entrada de muchas personas a un género que hoy disfrutan millones.
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Jugamos Super Mario RPG con un código proporcionado por un representante de Nintendo en nuestra región.