Los juegos de lucha libre tocaron suelo con WWE 2K20 y eso provocó que en 2K se pusieran las pilas para crear una experiencia atractiva que valiera la pena, la cuestión es que fue un proceso largo y muy complicado para lograr arreglar todos los daños de entregas previas. Eventualmente WWE 2K22 fue un buen título, pero ¿qué sucede con la llegada de WWE 2K23?
Pues sí, los juegos de lucha de la empresa más grande de “entretenimiento deportivo” volvió a entrar en el estigma de las entregas anuales, solo que en esta ocasión, digamos que el juego no cayó en una especie de bache o problema severo que deteriorara la experiencia, que es lo que solía suceder.
Sin embargo, WWE 2K23 cae en un par de pecados imperdonables, ofrecer pocas mejoras sustanciales o ajustes en las mecánicas de juego y el regreso de esos molestos glitches que harán la delicia de varios usuarios de redes sociales consumidores de videos cortos.
Los que sí es una realidad es que el nuevo videojuego de lucha libre no es ni los microvideos que sacarán lo peor el y tampoco la maravilla que los tráilers en YouTube
Siempre hay áreas de oportunidad para mejorar
La versión previa de WWE 2K23 fue muy buena, impuso unas mecánicas de juego entretenidas, lo suficiente como para no extrañar el pasado inmediato. La cuestión es ¿qué se puede hacer para mejorar lo que salió bien el año previo? Bueno, a la hora de jugar no pasó nada. Los métodos son los mismos y todo funciona bien, ahí no hay falla.
Lo que debió suceder en la ejecución del juego fue mejorar el tema de la física y la animación. Mejorar estos apartados harían que, incluso, esta serie se pudiese volver en una especie de esport, pero no se puede porque no fue atendido este apartado. Por ejemplo, la ejecución de una llave depende mucho de los pasos que van de un agarre y de la variable de si el movimiento es contrarrestado o no por el contrario.
De ahí debemos partir al resto de los modos, los cuales funcionan, pero también se sienten limitados, especialmente los que van más allá del Showcase, del cuál hablaremos más adelante. Se siente como si solo hubiera vuelto a colocar lo que ya conocíamos pero con una mascara distinta. Esto, por donde lo veas, está mal, sin embargo, pongamos entre paréntesis de que son modos que funcionan, así que tampoco es un desastre.
El área de oportunidad para ponerse creativo con los modos de juego pudo ir desde lo más básico, que es usar a tu luchador favorito y llevarlo a ganar el campeonato mundial en Wrestlemania o cualquier evento. Sí, tienes modos donde puedes ser el creativo, pero no estaría mal contar con una opción tipo arcade que te de una experiencia mucho más directa e inmediata con una historia predeterminada, justo como pasó en los primeros juegos de WWE Smackdown de PlayStation.
El Showcase de John Cena y sus ausentes
En esta ocasión, John Cena es el que aparece en los reflectores del showcase y, a través de este modo, puedes revivir las más grandes batallas del luchador con un doctorado en los Basic Thuganomics. Aparecer en este modo es una especie de reconocimiento por el que han pasado varios luchadores. Uno de los más divertidos fue el de CM Punk, también el de Rey Mysterio, ¿qué tiene de especial el de John Cena?
Bueno, en el showcase tienes la oportunidad de participar en combates en que John Cena fue derrotado por sus más icónicos rivales, la cuestión es que no aparecen, por ejemplo, CM Punk, quien es de sus más grandes rivales. No sale Alberto del Rio, quien también lo derrotó en su momento. Por obvias razones, no tenemos a este par dentro de este modo de juego.
Ahora, recrear estos combates te enseña cómo dominar el juego, lo cual es bastante digno y entretenido, pero, el acompañamiento es horrible, se usa música muy genérica para luchas que deberían ser memoriables. ¿Por qué no se usa el audio de los narradores de antes? Derechos de imagen y demás cuestiones. Eso le quita chiste al showcase.
En general, contar con John Cena en el Showcase es genial, incluso podría ser un spoiler de que tal vez lo metan al salón de la fama en la WWE en Wrestlemania de 2023, o en un año, todo puede suceder.
A los modos de juego de WWE 2K23 les hace falta amor
En WWE 2K23 tenemos varias experiencias de juego y entre ellas están la de ser el gerente general, armar una facción y crear a tu luchador. Técnicamente es casi un copy paste de la entrega previa. Cada modo hace que vivas, desde distintos ángulos, toda la experiencia de entretenimiento deportivo que está detrás de la WWE, lo cual no está mal.
La cuestión es que el reto detrás de cada modo no te hará sentir realizado por superarlo, es realmente circunstancial, sin mucho chiste, vamos, hace falta ese modo arcade donde quieras ser, por ejemplo, Kevin Owens y destrones a Roman Reigns. Crear una historia alrededor de derrotar al Bloodline hubiera sido como tratar de acabar The King of Fighters con Omega Rugal como el jefe final.
El tiempo que puedes pasar detrás de los modos de juego de WWE 2K23 puede ser muy largo, y eso está bien. Siempre tendrás algo que hacer y de seguro encontrarás cierto reto programando WWE Raw o Smackdown en MY GM, pero, es algo que ya hiciste en otras entregas. Los que llevan años jugando, no se van a sorprender mucho que digamos.
Si WWE 2K va a seguir siendo una experiencia anual, pueden darle mayor sentido a tener entregas previas. El único modo en el que vale más o menos la pena invertir tiempo es en el de crear un personaje y llevarlo a lo más alto de la empresa más grande de lucha libre, sin embargo, debe tener una historia mejor escrita que la que viene por defecto.
WWE 2K23 tiene glitches, pero son los menos
A la hora de que leas esta reseña vas a ver, de seguro, muchos microvideos en los que se ve que a un luchador se le tuerce un brazo o la cabeza de una superestrella se atora en el trasero de otra. Esto es porque las animaciones y la física de los personajes no están muy bien balanceados que digamos y ahí es donde todo se va al demonio.
Esto se arregla con parches y demás actualizaciones. Ahora, no vi tantos errores, solo algunas animaciones rotas usando objetos, pero no era algo grave o que rompiera el juego. Por ejemplo, cuando usas al Undertaker para hacer el movimiento de “la vieja escuela”, la animación se lleva a cabo de manera inteligente, pero si está el referí cerca, se puede entorpecer el movimiento.
Es casi un hecho que vas a ver muchos videos o, el mismo repetido una y otra vez. A pesar de que esos errores existan, WWE 2K23 funciona en un 97% de una manera correcta y, en la ejecución, de una manera muy divertida. Es un hecho que durante la temporada de lanzamiento, todos los problemas serán atendidos y eso hará que el juego sea todavía mucho más placentero.
Hay que admitir que el nuevo motor gráfico usado para WWE 2K entrega muchos más beneficios que errores y eso ayudará a que esta franquicia se mantenga a flote por muchos años más. Lo importante es que el apartado creativo pueda hacer algo más por el juego en el corto y mediano plazo para que comprar WWE 2K23 tenga un propósito mucho mayor.
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Gráficamente sigue luciendo genial, pero la música es un asco
La nueva generación de consolas le cayó de maravilla a los juegos de WWE porque ahora los luchadores se ven mucho más geniales. Vamos, no es fotorrealismo nivel Death Stranding, pero, en general, la mayoría de las superestrellas lucen muy bien y sus movimientos especiales también son una maravilla cuando se ejecutan.
El problema del juego se presenta en su música. La experiencia es horrible, especialmente cuando se escuchan los temas para el juego. La composición es pobre, aburrida, sin mucho que hacer, da flojera y la verdad es que algo tienen que hacer. WWE tiene muy buenos compositores de temas originales y podrían ayudar en el videojuego, pero pues, eso no pasa.
Por otro lado, la música licenciada no tiene fallas, incluso podemos decir que son temas muy buenos, acorde a la experiencia de siempre. No es que compita con FIFA, Madden NFL o el mismo NBA 2K, solo digamos que con sus recursos, los resultados son buenos. Hay un curador de música que hace bien su trabajo.
El elemento musical es muy importante para que el juego no se sienta tan plano y la verdad es que es un área de oportunidad que pudo mejorar y realmente no se pudo, no quisieron o la creatividad no dio para más y pues, ante eso no podemos hacer otras cosa más que, decir la verdad.
¿Deberías comprar WWE 2K23?
Los juegos anuales de deportes siempre tienen que buscar la mejor manera de convencer al usuario que compró el juego del año previo, a seguir pagando los 60 dólares una y otra vez. Entendemos lo que significan adquirir Madden, FIFA o el juego de la NBA, sin embargo, WWE 2K está apenas tratando de establecer una nueva identidad o una que atraiga a los fans de la lucha libre profesional de alguna manera.
WWE 2K23 toma todo lo bueno de la entrega del año previo, actualiza la alineación de superestrellas y no realiza alguna clase de ajuste que signifique alguna clase de riesgo real. En otras palabras, si no está roto, no hay necesidad de arreglarlo. Las mecánicas de juego siguen siendo entretenidas y jugar con los amigos entregará diversión garantizada, sin embargo, los modos de campaña no aportaron alguna clase de extra para diferenciarse a lo visto en años previos. Pudo ser mejor, pero no lo intentaron lo suficiente.
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