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Un estudio realizado por Take This —una organización de cuidado de salud mental que trabaja también la industria y comunidad de los videojuegos—, reveló que aquellos que se identifican como “gamers” tienen mayor tendencia a mostrar comportamientos radicales, manifestándose estos en conductas racistas y sexistas.

El estudio de Take This explica por qué los gamers tienden a ser extremistas
Fuente: Google

Durante mucho tiempo, la comunidad de gamers ha sido asociada a conductas tóxicas y extremistas, el estudio de Take This propone —desde un contexto específico— la perspectiva de las identidades y lo que esto sugiere. 

El estudio tomó como muestra alrededor de 300 jugadores y analizó sus conductas dentro de su comunidad —particularmente de Norteamérica—. Y mostró varias premisas, pero la más resaltable es la de la identidad. 


“Cuando la identidad del jugador es fundamental para lo que eres como persona, eso parece reflejar lo que llamamos cultura de jugador tóxico, tiende a reflejar más exclusión que inclusión, por lo que cosas como el racismo, el sexismo y la misoginia”, mencionó la Dra. Rachel Kowert, la directora de investigación.


Esto indicaría una propuesta de las identidades sociales que componen nuestra persona, de esta manera, la toxicidad de la comunidad se manifestaría porque los gamers no logran separar esa identidad de su identidad social mayor.

Reciente estudio explica por que los gamers serían racistas y sexistas
Fuente: A-1 Pictures

Gamers: su comunidad es un arma de doble filo

El estudio propuso la idea de la comunidad como un arma de doble filo, debido a que propone apoyo, pero en ocasiones, uno tóxico y cerrado. 

En otras palabras, por un lado, los jóvenes tienen un círculo de confianza que elimina la sensación de inseguridad, anormalidad y soledad. Por otro lado, los gamers se exponen a una comunidad cerrada que regularmente promueve discursos de odio —como el racismo y el sexismo— y la toxicidad social que sostiene su extremismo.   

Las conductas que existen y se desarrollan en sus espacios se internalizan y se normalizan, la identidad de la comunidad gamer se construye así, sin embargo, el problema real se daría cuando esto se expande a su vida cotidiana, porque los gamers terminarían siendo sexistas y racistas aún fuera de los videojuegos.

El problema de la identidad gamer

El estudio expuso que, los problemas surgen cuando el gamer fusiona su identidad normal con su yo jugador en un proceso llamado “fusión de identidad”. 

“Tenemos identidades individuales e identidades sociales. Así que soy Rachel, soy mujer y soy jugadora. Me encanta ‘The Witcher’. Estas son mis identidades sociales y están separadas”, dijo Kowert.

Menciona que, cuando se da el proceso de fusión, esta hace a los gamers más susceptibles a los comportamientos extremistas. 

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La toxicidad adherida al término gamer

La misma comunidad debate la caracterización del concepto —fuertemente—. Se discute si puede ser gamer aquel que juega videojuegos en PC, o sólo consolas, e incluso los videojuegos en celulares —los de peor prestigio—. 

Esto también da cuenta de la propuesta del estudio, debido a que las comunidades virtuales son cerradas y “cuidan” a quien está dentro, pero desdeñan a los de afuera. 

La comunidad tiene filtros rigurosos acerca del reconocimiento de los otros. 

¿Y tú qué opinas de la idea de los gamers? ¿Son racistas y sexistas? Date una vuelta por Discord y no te pierdas las noticias en Google News.