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¿Qué estabas haciendo en el 2013? Probablemente estabas enfocado en estudiar, encontrar un trabajo, conseguir una novia o ahorrar para la siguiente generación de consolas en la que se incluía al PlayStation 4.

Sí, el PlayStation 4 cumple 10 años de existencia y muchas personas la siguen utilizando, tal vez no como si hubiera salido ayer, pero juegan mucho con ella. En aquel lejano 2013 la consola de Sony competía con Google Glass, iPad Air y hasta Google Chromecast para ganarse la atención de la gente.

Su lanzamiento fue fluido. No sucedió como ahora con el PS5 que se había agotado en una semana o que la reventa la tenía en precios fuera de control. Incluso podríamos decir que en México estaba en su lanzamiento a un precio ciertamente accesible (más o menos 7,500 MXN).

Los juegos que tuvo desde el inicio no eran extraordinarios, pero por algo se comenzaba y de a poco despegaba la consola que tuvo pasos sólidos en sus inicios, sin complicaciones, evitando errores clave y dándole a los jugadores una experiencia fuera de pretensiones y funcional… Pues se habían dado cuenta que la competencia ya estaba fallando.

Primer paso, no repetir los errores del PS3

El primer anuncio del PlayStation 4 tuvo a Marc Cerny hablando de muchas barbaridades clavadas que solo los desarrolladores y algunos miembros de la prensa entendían. Básicamente Sony dijo “no debemos repetir lo que pasó con el PS3 y nos debemos unir al estándar de la industria en general”.

Claro, no fue con esas palabras, fue más bien explicarle a la gente que abandonaban el chip cell del PS3 para ir tras un sistema más amigable, el famoso x86 de las PC y así dar a los desarrolladores todas las herramientas necesarias para hacer los juegos sin mayor complejidad y problemas.

El primer modelo del PlayStation 4
Fuente: Sony

Con eso mataban toda la esperanza de retrocompatibilidad con PS1, PS2 y, sobre todo, con PS3 pues ya no era la misma tecnología. Bien pudieron invertir en desarrollar emulación, pero digamos que nunca quisieron y los usuarios terminaron fastidiados. Este fue una especie de “reboot” necesario por parte de Sony, lo cual fue un error y bendición a la vez.

Fue un error porque técnicamente tiraron a la basura más de 10 años de videojuegos que salieron en las generaciones previas (casi hacen lo mismo con PS3 cuando quitaron la retrocompatibilidad con PS2) y eso molestó a muchos jugadores. La bendición fue que los desarrolladores hicieron muchos juegos, los suficientes como para sacarle provecho a la plataforma y a la generación.

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Ser una consola amigable para desarrolladores y jugadores

A veces cuesta trabajo entender que el PlayStation 4 no trataba de ser la consola más potente del mercado. Más bien quería ser la más funcional y efectiva. Esto generó un par de cuestiones, la primera era que la barrera del DRM fuera lo más pequeña posible y que en cada disco comprado, estuviera un videojuego en un estado jugable y que se “pudiese compartir”. Esta fue una medida pro-usuario que parece más un meme y burla que un recuerdo positivo.

Sí, hubo muchas promesas sin compartir con el PlayStation 4, como arrancar los juegos suspendidos y demás características que, hasta la fecha, aún no funcionan correctamente, pero a cambio contábamos con una experiencia de usuario ciertamente compacta y personalizable. La forma de uso del PS4 no se parecía en nada a la del PS3, pero de menos la experiencia resultaba amigable.

Dualshock 4, el control del PlayStation 4
Fuente: Sony

Los desarrolladores ya no tenían que batallar con poca cantidad de memoria y programar para un chip que era poderoso, pero difícil de utilizar. Por eso en la época del PS3 muchos juegos importantes lucían diametralmente mejores en Xbox 360 que en la consola de Sony. Un ejemplo claro es Bayonetta que hasta en Wii U luce mejor que en el PlayStation 3.

Lo mejor que pudo pasar es que los desarrolladores tuvieran las herramientas más sencillas para pasar sus juegos a la consola de Sony. No se da el suficiente mérito a Marc Cerny por dicho logro, pero de verdad, no tendríamos lanzamientos simultáneos en consolas si los sistemas no estuvieran unificados en un mismo lenguaje, que es x86. Si siguiéramos con consolas por una generación más y de pronto se nos ocurriera usar chips M4 – como el de Apple – ahí sí, todos tendrían que agarrarse confesados porque toda la industria tendría que cambiar.

Los exclusivos son clave, pero no lo único que tenía el PlayStation 4

En la guerra de consolas siempre estará la discusión alrededor de las exclusivas. Que si son muchas, pocas, inservibles, sobrevaloradas, inútiles y demás. El caso del PlayStation 4 es muy particular porque finalmente ni fueron tantas o no tuvieron el éxito que muchos hubieran deseado.

Por ejemplo, de lo primero que tuvimos fue Knack y Killzone: Shadow Fall, ambos títulos perfectamente olvidables. También tuvimos The Last Guardian y The Last of Us Part II. Pero también salieron Driveclub y The Order: 1886 que son ciertamente mediocres, pero a cambio lanzaron Bloodborne y Ratchet and Clank del 2016.

Juegos en oferta del PlayStation 4

Vamos, el PlayStation 4 de Sony tuvo una cantidad moderada de exclusivas, pero al mismo tiempo no todas tenían la suficiente calidad como para que los usuarios salieran enteramente felices después de jugarlas. Lo que sí fue un hecho es que el PlayStation 4 se volvió en el lugar más amigable para jugar Fortnite, FIFA, Call of Duty y otras buenas propuestas multijugador. Las distintas alianzas y sociedades que Sony hizo generaron muy buenas ofertas para los jugadores, pero también exclusividades discutibles que, hasta la fecha, muchos recuerdan de muy mala gana.

Detalles que no olvidaremos nunca

Vamos, a 10 años no podemos olvidar ciertas cosas del PlayStation 4:

  • La consola suena como una turbina de avión cuando corres ciertos juegos.
  • Aún podías prestar un videojuego.
  • El no tan efectivo uso a distancia con el PS Vita.
  • Carente retrocompatibilidad.
  • El touchpad que solo usas de botón.
  • Revivir el PS Move a través del PS VR.
  • Ver que tu disco duro se acabe con 3 juegos instalados.
  • Que se prendía al mínimo toque del botón de encendido.
  • Dejarlo suspendido no era la mejor idea si alguien más lo llegaba a tocar.
  • Todavía tienes P.T. instalado.
  • Actualizaciones que no servían para nada.
  • Usar el PS Vita como control.
  • Grandes y lentas descargas de actualizaciones de juegos.
  • Subir videos a tus redes sociales con un botón.

Y podríamos seguirnos con más momentos que serían memes en estos momentos, pero la memoria no nos da para tanto. Digamos que solo nos quedamos con lo mejor.

Todavía sirves, todavía sirves

A diez años de su lanzamiento, dependiendo del cuidado que le dieras o la versión que compraste – incluso el año en que la adquiriste – es que el PlayStation 4 sigue funcionando de la manera correcta. Los expertos dirán que ya está en las últimas porque el procesador ya no tiene pasta térmica, tu consola está llena de polvo o, en su defecto, puede ser un horrendo imán de cucarachas, que habla más mal de ti que de la consola.

La cuestión es que, con todo eso, el PlayStation 4 sigue presente y recibe juegos, quien sabe si todavía en 2024 las cosas sigan bajo el mismo tenor, pero mucho de lo que salió en el PS5 y Xbox Series todavía estaba disponible en la generación previa.

De seguro muchos la disfrutan y esperan con paciencia a que la actual generación de consolas tenga todavía un precio más accesible, que no sabemos exactamente cuándo suceda eso. Lo único que queda es disfrutar esa librería de juegos en una consola que muchos recordarán tanto por las buenas como por las malas. No olvides que estamos en Discord y que puedes seguir nuestras noticias en Google News.