Esta demanda se remonta a un acuerdo de hace 20 años
De acuerdo con Eurogamer, los compositores de la música original de Halo están demandando a Microsoft por una falta de pagos por regalías que datan de hace 20 años. Los abogados que representan a los músicos Marty O’Donnell y Mike Salvatori han acordado una mesa de diálogo en la tercera semana de febrero de este año con la compañía.
El proceso de demanda empezó en el estado de Washington en junio de 2022 y se había mantenido sin mayores resultados, pero hace poco hubo un cambio drástico con la estrategia que forzó la mesa de diálogo próxima: O’Donnell y Salvatori le pidieron a sus abogados bloquear el lanzamiento de la serie de televisión.
La serie de televisión de Halo se anunció en 2021 y se espera que se estrene en 2022 a través de Paramount+, pero puede que la orden judicial preliminar modifique su fecha de estreno indefinidamente. El destino de esta producción yace en las pláticas venideras.
Su demanda presentó seis causas de acción contra Microsoft: incumplimiento de contrato; incumplimiento del deber fiduciario de desarrollar los ingresos por regalías en una empresa conjunta; incumplimiento del deber de actuar de buena fe y trato justo; falta de proporcionar una sociedad de contabilidad; Enriquecimiento ilícito y la interferencia tortuosa.
En una entrevista telefónica con Eurogamer, O’Donnell afirmó que tanto él como Salvatori habían tratado de buscar otra solución ante las supuestas regalías no pagadas por Microsoft, pero no habían tenido éxito.
¿Por qué están demandando los compositores de Halo a Microsoft?
De acuerdo con los demandantes, ellos crearon y licenciaron la música de Halo directamente a Bungie, un acuerdo que se mantuvo a pesar de la compra del estudio en el 2000, previo al lanzamiento del videojuego. Pero, ese sólo es el inicio del problema.
Microsoft declara que la música del videojuego califica como ‘trabajo por contrato’ y por ello es que la compañía califica como dueño de los derechos de autor del trabajo.
O’Donnell y Salvatori niegan que esto sea así: ‘Nunca fue un trabajo por contrato. Siempre fue un acuerdo de licencia, así que de esa forma trabajamos con la música de Halo, que fue escrita y grabada en 1999 por primera vez. Fue licenciada a Bungie y esta no fue comprada por Microsoft hasta un año después’.
En mayo de 2020, O’Donnell se convirtió en empleado de Bungie (y tras la compra del estudio, en empleado de Microsoft) y trabajó como director de audio del estudio, mientras Salvatori siguió siendo un artista independiente y como parte de O’Donnell Salvatori Inc, de la que también era parte el propio O’Donnell.
Poco después de que el músico se convirtiera en empleado de Microsoft, menciona que los problemas crecieron cuando les dijo que la música de Halo es propiedad de O’Donnell Salvatore, Inc. y no de ellos. Luego de este evento, lo llamaron a hablar con los abogados de la compañía.
El compositor menciona que nunca se llegó a un acuerdo formal, pero empezaron a utilizar la música en tráilers, pero que seguían sin resolver qué sucedería con la licencia y las regalías. Tanto la característica música del canto del monje del inicio del videojuego como el tema de entrada fueron utilizados para publicitar la música.
No hubo claridad en el proceso
Todo empeoró con el lanzamiento de Halo 1, la empresa O’Donnell Salvatori Inc. firmaba directamente con el sindicato de músicos ASCAP por la ejecución y grabación de la música del videojuego en Chicago, un trabajo que dicen ‘le correspondía hacer a Microsoft’. Al final, no siguieron con este problema y pasaban las facturas del proceso a Microsoft.
Cuando firmaron el primer contrato nuevo, O’Donnell menciona que quería hacerlo bajo las reglas de compositores de la ASCAP, en las que los derechos siguen siendo de los creadores y no de una compañía, además de obtener un porcentaje de las regalías: ‘Se supone que O’Donnell Salvatori obtiene el 20 por ciento de cualquier cosa fuera del juego que use la música. Lo cual, por cierto, es bastante razonable. Muchos compositores y gente de la música en el negocio del cine obtienen más del 50 por ciento’.
De acuerdo con este trato, deberían de haber visto un informe trimestral con las ganancias totales y el porcentaje que recibirán de ellas. Desafortunadamente, nunca recibieron directamente este registro de contabilidad.
Sin embargo, O’Donnell no quiso hacer mucho ruido con respecto a este problema con la música de Halo para mantener su empleo en Microsoft. En 2014, abandonó Bungie y fue señalado por la compañía por ‘desacato por su uso de los activos de Destiny’, pues el compositor había subido la música a su canal oficial de YouTube. Este juicio también sigue en proceso, de manera lateral.
En ese momento, O’Donnell y Salvatori iniciaron su demanda contra Microsoft, por las supuestas faltas en el acuerdo firmado con la compañía. Además de la falta de informes de la contabilidad de las ventas, mencionan que no recibieron un porcentaje justo correspondiente al éxito de la banda sonora de Halo 2.
Parte de la demanda en curso es, según O’Donnell, para calcular exactamente cuánto dinero se debe potencialmente antes de establecer una cantidad en dólares por daños y perjuicios.
Los compositores no aparecen en los créditos de Halo Infinite
Además, O’Donnell y Salvatori se enojaron recientemente con Microsoft aparecer en los créditos de Halo Infinite. De acuerdo a ellos esto estaba en su contrato: ‘Están regrabando toda la música de Halo Infinite y ni siquiera nos dan crédito. Parte de nuestro contrato incluso decía: ‘Si vas a volver a grabar cualquiera de nuestras cosas, debes contactarnos, hablar con nosotros al respecto o darnos algún tipo de información’.
Ambos compositores mencionan que la compañía no se acercó con ellos sobre esta regrabación de la música ni son mencionados en los créditos del videojuego ni mucho menos están recibiendo el 20 por ciento acordado hace 20 años. Por todo esto, es que planean continuar su proceso legal en contra de Microsoft.
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