Dying Light: The Beast
Overall
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Mecánicas de juego - 90%90%
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Historia - 80%80%
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Música - 80%80%
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Gráficos - 90%90%
Summary
Dying Light: The Beast es un juego muy divertido que mejora el brutal combate cuerpo a cuerpo junto con el satisfactorio parkour para explorar que caracteriza a la serie y le añade un modo bestia que te hará sentir todo un sanguinario mastodonte imparable. Todo para entregar una experiencia muy entretenida y cargada de contenido que podrá entretenerte por horas.
- Genero: Survival horror
- Plataforma: PS5, PS4, PC, Xbox One, Xbox Series X|S
- Estreno: 18/09/2025
- Publicador: Techland
- Desarrollador: Techland
Desde hace varios años Techland tomó la decisión de hacer un planeado DLC de Dying Light 2 su propia historia luego de que sus ambiciones crecieron bastante. Gracias a esto se formó Dying Light: The Beast, una entrega totalmente nueva que nos traería de regreso al primer protagonista de la saga: Kyle Crane.
Luego de algunos retrasos, por fin la nueva historia de esta serie que combina el parkour con la matanza de zombies está aquí y llegó con varias mejoras y nuevas mecánicas. ¿Pero de verdad merecía ser su propio juego en lugar de un DLC? Aquí te doy la respuesta después de haber jugado toda su historia.
¿De qué se trata Dying Light: The Beast?
Dying Light: The Beast nos vuelve a poner en los zapatos de Kyle Crane. Luego de los eventos de The Following, el GRE lo captura y comienza a hacer diferentes experimentos con él debido a que ahora es un volátil inteligente. Esto lo pone bajo el ‘cuidado’ de un hombre simplemente conocido como El Barón que lo usa como su conejillo de indias por 13 años.
Luego de un suceso donde otro sujeto de prueba escapa y causa caos en el laboratorio donde se encuentra, Kyle también logra salir para encontrarse en el poblado de Castor Woods. Una vez afuera una científica con conciencia llamada Olivia lo ayuda a recuperar su fuerza y comenzar su viaje de venganza en contra de El Barón.

La historia de Dying Light: The Beast realmente llega a ser entretenida y tiene ese encanto de cinta de acción ochentera. Aunque ves venir los giros a kilómetros de distancia, no deja de ser divertido verlo. Además de que tiene una serie de personajes que te dará gusto seguir y ayudar a lo largo de tu viaje. Así como una curiosa desviación hacia el terreno de la ciencia ficción.
Además siendo honestos la saga no se ha caracterizado por tener historias que te dejen pensando o se queden contigo mucho después de que los terminas. Sin embargo The Beast cumple con darte una excusa para continuar avanzando mientras pruebas todas sus novedades en cuanto a jugabilidad.
Parkour, combate cuerpo a cuerpo y algo más
En cuanto a la jugabilidad de Dying Light: The Beast, esta es prácticamente la misma que de sus antecesores. El enfoque en el combate cuerpo a cuerpo y la exploración mediante parkour se mantiene intacta. Claro que también aprovecha para meter unas cuantas mecánicas.
Para quienes no jugaron los anteriores, deben saber que el principal método de defensa son las distintas armas cuerpo a cuerpo que hay en el mapa. La mayoría de los enfrentamientos son físico pues incluso los enemigos humanos prefieren atacar con hachas, cuchillas, bates o lo que se les ponga enfrente, mientras que los zombies atacan con mordidas y rasguños.

En Dying Light: The Beast, al suceder en un tiempo donde aún queda más de la civilización. también hay más presencia de armas de fuego. Estas se sienten muy bien de usar con un apuntado más realista que se tambalea y afecta mucho por el retroceso. Claro que las balas se mantienen escasas, por lo que sólo es bueno usarlas en emergencias.
En cuanto al parkour, me pareció que esta entrega es la que nos da el mejor de todos pues se siente realmente fluido y responsivo. Fácilmente puedes pasar de una carrera a toda velocidad a un salto por diferentes postes y cuando menos te des cuenta ya estarás en lo alto de un edificio. Creo que es uno de los mejores sistemas de parkour no sólo de la saga, sino de los videojuegos.
También el movimiento tiene una novedad den la forma de la capacidad de manejar distintos vehículos para viajar rápidamente por secciones grandes del mapa. Esta realmente se siente muy bien y también añade el tener que buscar gasolina para tu auto. Aunque en los personal preferí más el parkour, es una buena adición que te ayuda a ahorrar tiempo.
Dying Light: The Beast le hace honor a su nombre
Otra novedad en la jugabilidad de Dying Light: The Beast es justamente el modo bestia. Debido a los experimentos a los que fue sometido, Kyle Crane puede entrar en un estado donde se vuelve altamente agresivo, fuerte y veloz. Lo mejor de todo es que nosotros los controlamos en esos momentos y podemos sentir todo su poder.
Por si fuera poco, el modo bestia se puede mejorar conforme avanzas en la historia luego de enfrentar a varios jefes infectados especiales. Cada que derrotas a uno de ellos consigues un punto de bestia que después puedes gastar en un árbol de habilidad para desbloquear nuevos poderes. Como un poderoso golpe que impacta a todos a tu alrededor o la capacidad de iniciar una carrera que destruye a cualquiera que se te ponga adelante.

Al principio de Dying Light: The Beast no es posible controlar este poder. Simplemente se va llenando la barra con cada ataque que haces e incluso que recibes. Una vez que está lleno, entonces Kyle pierde el control y puedes usarlo contra los enemigos que te rodean. Sin embargo, ya más avanzada la historia puedes activarlo a placer, lo cual es muy útil especialmente en las noches y en enfrentamientos con jefes.
Gracias a esta mecánica también brilla bastante el ya espectacular sistema de gore, pues mientras atacas en modo bestia hay ocasiones en las que puedes hacer unos finishers muy vistosos y bastante sorprendentes. Indudablemente es una genial adición al juego que además lo hace bastante más divertido.
En este apartado también debo mencionar que me gustaron bastante y me parecieron creativos los distintos monstruos a los que te debes enfrentar para aumentar los atributos del modo bestia en Dying Light: The Beast pues estos combates me parecieron de los mejores del título.
Gráficamente se ve muy bien aunque también hay varios errores extraños
Ahora vamos al aspecto técnico de Dying Light: The Beast. En primera, su aspecto visual está muy cuidado y es realmente muy bueno. Los escenarios, desde sus ciudades antiguas hasta sus bosques frondosos y sus cavernas ocultas tienen un detalle impresionante, mientras que los zombies son muy grotescos y es muy realista cómo llegan a perder partes del cuerpo con cada uno de nuestros ataques.
También debo mencionar que la noche en The Beast una vez más es de temer. Nada más se oculta el sol y no verás absolutamente nada si no prendes tu lámpara, aunque esto último podría hacer que te detecten los casi invencibles volátiles y te persigan por toda la ciudad. Esto añade un enorme grado de tensión y regresa un poco ese horror que se había perdido en la segunda entrega.

Aún con lo cuidad de sus gráficos y lo divertido de su jugabilidad, siento que aún hay cosas por arreglar en cuanto a desempeño. En mi tiempo de juego me encontrá varios problemas, desde algunas caídas de frames, hasta zombies que parecían vivos después de unos momentos antes de caer muertos o incluso enemigos que podían atacarme a través de las paredes.
La mayoría de los problemas que tuve en Dying Light: The Beast se dieron en cosas de interfaz de usuario. Por ejemplo, muchas veces desapareció el indicador de misión dejándome sin idea de qué hacer o a dónde ir. También un pequeño ícono de tus herramientas disponibles desaparecía constantemente forzándome a ir al menú para activarlo y desactivarlo otra vez, lo cual llegó a ser molesto.
¿Deberías jugar Dying Light: The Beast?
Dying Light: The Beast me parece un juego que a pesar de sus errores de desempeño, puede ser realmente muy divertido. Mejora bastante el parkour y el combate que ya conocemos y amamos de esta saga, pero le añade el modo bestia para darnos aún más herramientas para divertirnos en el viaje.
Además tiene bastante contenido con una ciudad llena de cosas por recolectar, misiones que completar y diferentes retos adicionales que enfrentar. Todo mientras viajamos en una urbe diseñada para sacar lo máximo de nuestra creatividad de parkour que te hará sentirte todo un maestro cuando fluyas por sus tejados.

Los fans de la serie indudablemente estarán contentos con Dying Light: The Beast y seguro no podrán esperar para ver a dónde más nos lleva Techland con esta saga y sus muertos vivientes, ya que probaron que tienen mucha creatividad para seguirnos trayendo de vuelta. Aunque quizás quieras esperar unos cuantos parches para disfrutar de la mejor versión de este título.
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Jugué Dying Light: The Beast en PlayStation 5 con un código proporcionado por un representante de Techland en la región.


