Hades es una gema reluciente en el inframundo de los indies

Es octubre, mes de la llegada del otoño, el pumpkin spice latte y de celebrar lo tenebroso del inframundo, claro que suena al mes perfecto para un juego estelarizado por el mismísimo príncipe Zagreo, hijo del olímpico Hades (aunque se estrenó en septiembre, pero no le digan a nadie)

Supergiant Games nos entrega este título de acción rogue-like basado en dinámicas de mazmorras con características que tanto les llaman la atención a algunos: no hay puntos de guardado, no hay regeneración de vida al por mayor, y si mueres por más que hayas estado a punto de alcanzar el final, retornarás al inicio, a la morada de Hades.

Si bien los juegos de este género suelen tener mecánicas repetitivas y una trama simple, Hades no es uno de ellos, pues te atrapará por su variada rejugabilidad, no solo en cuanto a armas y habilidades, sino al continúo cambio de orden de las mazmorras y sus enemigos.

Es muy poco probable que repitas el mismo camino a lo largo de tus enfrentamientos hack and slash, pero lo que sí irás adquiriendo serán reflejos y tácticas, necesarios si quieres salir del inframundo… algún día. Así como la aprobación de aliados y enemigos, quienes son testigos de cada uno de tus intentos y te recompensarán de alguna manera.

Muy bonito el inframundo, pero quiero salir de aquí

Como te contábamos, Zagreo es el hijo de Hades quien solo tiene una misión en su vida… bueno, existencia: salir del inframundo hacia el mundo mortal y luego al Olimpo. Claro que sus tíos y primos están enterados de su misión, por lo que tratarán de ayudarte de la mejor manera. Aunque solo sea para molestar a Hades.

Claramente tu padre no lo aprueba ni un poco.

En la piel de este habilidoso guerrero, entrenado nada menos que por el mismo Aquiles, serás capaz de dominar 6 armas, cada una con sus propias variantes. ¿Te gusta entrar de lleno a la acción y pelear frente a frente? Entonces llévate la Espada Estigia.

¿Prefieres los ataques a distancia? El Arco Clavacorazones o el Escudo del Caos serán tus mejores amigos.

Cada una de ellas funcionará de manera diferente dependiendo de qué habilidades olímpicas tengas: daño por truenos, repulsión de enemigos por agua, reflejo de daño… tú eliges el estilo de juego que se adapte mejor a ti, con las opciones que el juego te da.

Morir tantas veces no es tan malo

En todo juego de este estilo hay una o varias tiendas en donde puedes ir comprando mejoras para fortalecerte y que tus intentos de escape no sean tan dolorosos como al inicio.

A pesar de que al morir sí pierdes todo tu dinero (que usas para comerciar con el tacaño de Caronte), conservas tus unidades de oscuridad y tus gemas, que te servirán para desbloquear las mencionadas mejoras, como pueden ser el daño adicional o una ligera regeneración de salud.

Zag, como le dicen sus amigos (que no sabemos si son muchos en el inframundo). tiene tres ataques para valerse por sí mismo: ataque estándar, ataque especial y un conjuro, ayudado por un dash también llamado acelerón, muy útil al momento de posicionarte.

Este dash también te permite pasar por las trampas sin activarlas para usarlas en tu defensa, y esta es otra maravilla del juego (o pesadilla según veas), las trampas del entorno pueden jugar tanto a tu favor o en tu contra; en un par de recorridos seguro las dominas… esperamos por tu bien.

¿Qué clase de droga infernal es esta?

De cualquier manera, Hades te quita el miedo a morir después de un par de veces. Y eso es algo que Supergiant logró muy bien con este título: ya no te asusta perder o morir, lo único que quieres es volver a intentarlo.

Quieres volverte más fuerte e intentarlo de nuevo porque ¿qué tal que ahora sí lo terminas? La rejugabilidad de este título es una delicia para quienes gustan de explorar el juego una y otra vez, a la par que se hacen diestros en las mecánicas de combate.

Te aseguramos que podrás pasar 40 horas entre recorridos y no te habrás dado cuenta. Si quieres una pista de cuánto podría tomarte, muchos jugadores suelen salir victoriosos por primera vez después de 30 intentos, o 30 horas… más o menos.

Además, Supergiant tampoco es tan sádico… a lo largo de tu viaje irás aumentando el máximo de tus puntos de vida; así como adquiriendo más poder.

La recreación del mito griego, pero con jueguitos

Por si todas las mecánicas y la increíble rejugabilidad no fueran suficientes, Hades también tiene un apartado narrativo destacable dentro del género rogue-like.

No es esperes un historia compleja a lo Death Stranding, pero sí podrás percibir cómo la recreación de los mitos griegos, las alianzas y los disgustos entre dioses, así como figuras mortales relevantes como el propio Aquiles u Orfeo, le dan un toque único a cada uno de tus recorridos.

Conforme vayas desbloqueando más habilidades y escenarios mayor información te irá proporcionando el juego, así como mayores retos.

Por ejemplo, en una ocasión tuvimos que decidir entre elegir la bendición de Poseidón o la bendición de Artemisa, elegimos al dios de los mares y la diosa de la caza nos hizo pasar un muy mal rato solo porque… estaba enojada.

El humor ácido de Zagreo y las constantes burlas de Hades por tus múltiples fracasos también aligeran mucho la tensión de fallar una y otra vez. Ah, y hay un narrador bastante divertido que te va a molestar un par de veces con su voz en off.

Quizá no hay mucha alegría en el Tártaro, pero la música y el arte son increíbles

Finalmente, y no muy alejado del núcleo del juego, tenemos a la banda sonora que te acompañará durante horas.

A cargo de Darren Korb, quien también se encargó de otros títulos de Supergiant como Transistor y Pyre, las melodías de Hades logran crear una fantástica amalgama entre acordes de rock y ecos de historias épicas dignas de la antigüedad.

Personalmente disfruté mucho la tensión y el ambiente que crean los temas de batalla o los que suenan en los escenarios más complicados, Hades realmente es un maestro en construir la atmósfera adecuada.

¡Y esta en Spotify!

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Por otra parte, los diseños de los personajes cuentan con un estilo bastante estilizado y te verás rodeado de husbandos y waifus por doquier, solo te bastará con ver a Zagreo o alguno de sus múltiples familiares:

En el nombre del Olimpo… Este es nuestro veredicto

Hades es probablemente uno de los mejores rogue-like de los últimos años, lleno de originalidad, sus mecánicas de juego vuelven cada intento adictivo. Siempre te hará decir… Bueno, una más y ya.

En cada uno de estos viajes te verás recompensado de alguna manera, al mismo tiempo que experimentas la pérdida de importantes bendiciones… oh, el dolor. Quizá la curva de aprendizaje sea algo dura al principio, pero valdrá toda la pena.

No se siente repetitivo y, en general, se percibe como un título integral con altos estándares en todos sus apartados.

Hades emerge como una gema preciosa, oculta entre las profundidades del inframundo.

Se encuentra disponible para PC a través de Steam y la Epic Store, así como para Nintendo Switch.

Esta reseña se realizó con una copia del juego para Steam.