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Una universidad estadounidense ofrecerá becas a los jugadores más habilidosos.


Los videojuegos son la experiencia recreativa por excelencia del Siglo XXI, y esto se evidencia por los elementos característicos del milenio que mejor se manifiestan en dicho medio. Tales elementos son la interactividad propia de nuestra sociedad de hipermediaciones, el culto al ocio, la ideología tecnocrática y el individualismo entre otros valores que componen a la sociedad occidental moderna. Uno de los aspectos más importantes, por no decir central, es la idea de la competitividad, concepto que aquellos jugadores longevos y novatos comprenderán perfectamente si pasaron por alguna experiencia en títulos online como HALODotAOverwatch, donde las competiciones pueden llegar a ser muy intensas.




La competitividad es propia de nuestra sociedad capitalista, donde nos presionan desde el primer momento para que salgamos a devorarnos a nuestros rivales en todos los ámbitos de la vida, ya sea en el trabajo, en los estudios y, fundamentalmente, en los deportes. Los deportes son el campo donde la competencia y la meritocracia priman por sobre el resto de las cosas, donde la superioridad de un bando tiene que demostrarse mediante acciones y justificar así la recompensa obtenida por la dulce victoria. Por supuesto, los videojuegos multijugador tienen un elemento de competencia muy fuerte y, por ende, cabrían perfectamente dentro de este marco.

 
Así nació la idea de los eSports o deportes electrónicos, donde reconocidos jugadores de todo el mundo arman ligas y competiciones muy concurridas para demostrar sus hablidades en ciertos juegos. La estrategia, el tacto, la agudeza de los sentidos y la garra son los recursos de los que se valen para ofrecer un gran espectáculo a aquellos que asisten a estos eventos.
Sin embargo, algo que nadie imaginaría es que dicho fenómeno se haya integrado tan bien a los deportes, que hasta empiece a recurrir en algunas de sus prácticas más singulares. En este caso, hablamos de subvenciones o becas para aquellos interesados en seguir una carrera en este ámbito, tal y como la Universidad de California en Irvine decidió otorgarles a los aspirantes a ser gamers profesionales.
En efecto, dicha institución cuenta con un programa que incluía al juego MOBA League Of Legends donde sus jugadores podían recibir el apoyo y la infraestructura necesaria para sustentar su carrera. Ahora resolvieron expandir su programa al popular videojuego de Blizzard, Overwatch, dándole la posibilidad a los futuros Pros de vivir haciendo lo que más les apasiona.

Los becarios recibirán $2500 dólares anuales, en tanto se comprometan a pasar de 15 a 20 horas semanales para “prácticas, reuniones de equipo, servicio a la comunidad, ejercicios y competiciones” durante las temporadas. Tendrán también acceso al soporte atlético de la universidad tales como entrenadores personales, coaches e incluso psicólogos del equipo. Lo más curioso de todo, es que este proyecto de las becas nació de un reducido club de amantes de los videojuegos, y ya contaban con un equipo propio de Overwatch. El mismo ganó el torneo de Tespa 2016 en su edición de verano, y mantuvieron una envidiable racha de invictos la siguiente temporada.
“Esperamos conectar la emoción generada por nuestros equipos competitivos con los esfuerzos de avanzar junto con otros pilares: lo académico, la comunidad y el entretenimiento” – dijo Mark Deppe, director de eSports de la UCI. También aseguró que la comunidad de fanáticos de Overwatch se alinean con el objetivo de la universidad de volver al programa “más inclusivo y accesible para grupos que no tienen representación en los eSports”.
 
Y a tí…¿Te gustaría recibir dinero a cambio de jugar a tus juegos favoritos?
[Fuente]