Un artista aficionado decidió mezclar los universos de Street Fighter II y Dragon Ball. El resultado es genial, y nos recuerda la relevancia de ambas series
Dragon Ball es un manga y anime que trasciende épocas. Desde que Shueisha publicó su primer número en 1984, se hizo de un lugar no solo en la cultura pop japonesa, sino mundial.
Hasta hace unos años había perdido un poco de fuerza, pero resurgió de nuevo cuando se estrenó su nueva serie Super. Eso también reavivó el interés de muchos fans, y desde luego, surgieron muchos otros en años recientes.
Street Fighter II y Dragon Ball influyeron en la cultura popular
Por otro lado, Street Fighter II, cuya versión original se remonta a 1991 en las arcades, fue una verdadera revolución. Debido a sus múltiples versiones, es uno de los títulos más vendidos de su propio género.
Casi 30 años después, Masahiro Sakurai, creador de Super Smash Bros., reconoce que para él es el “Rey de los Juegos de Pelea”, y lo seguirá siendo por siempre. Es una propuesta que sentó escuela.
https://www.tierragamer.com/dragon-ball-live-action-dwayne-johnson-kevin-hart-nappa-vegeta/
¿Qué pasa cuando reunimos a Dragon Ball con Street Fighter II? ¡Pues nace Dragon Fighter! Este es el resultado del trabajo de FROM HELL (@drawingsfromhell), un artista que decidió crear un crossover de ambas franquicias.
De modo que tomó a varios de los personajes creados por Akira Toriyama y los vistió como si fueran los clásicos peleadores de Capcom. Como era de esperarse, Goku tiene el papel de Ryu.
Dragon Fighter, una idea que suena bastante atractiva
Entonces, ¿Vegeta es Ken? En realidad prefirió caracterizarlo como Guile. Quien ocupa el lugar del joven Masters es Krilin, que en su tiempo fue el rival más cercano de Goku, y también discípulo del Maestro Roshi.
De modo que es una selección apropiada. A Piccolo lo puso un poco “bestia”, todo debido a que está interpretando a Blanka. Si nos damos una vuelta por la cuenta en Instagram de este artista, vemos otros trabajos.
Es así como Tien Shinhan ocupa el lugar de Dhalsim, Milk de Chun-Li y Nappa de Zangief. En el caso de Yajirobe le tocó ser E. Honda, aunque este Guerrero Z no es tan fornido como este luchador de sumo.
Esta idea de mezclar a Dragon Ball y Street Fighter II es sin duda divertida. El nombre resultante, Dragon Fighter, suena como uno de los “clones” que surgieron en la década de los 90. Así es como vemos reunidas dos series clásicas.