Nos lanzamos a ver Cuando Las Luces Se Apagan y te contamos si nos dio mucho o poco miedo.
Díficil que una película en la actualidad logre impactar dentro del género del terror, podríamos decir que Cuando Las Luces Se Apagan (Lights Out) lo logra a medias, pero con puntadas ingeniosas. La historia es relativamente sencilla, tenemos la existencia de un ente malvado y que solo puede moverse a través de la oscuridad, por otro lado tenemos a una familia que practicamente ha vivido con esta maldición durante mucho tiempo. La película evoca bastante bien este tema que seguramente muchos sufrieron durante su infancia: la oscuridad y las luces apagadas.
Durante la película poco a poco se irán revelando mucho más detalles de por que esta malvada chica es fanática de vivir en la oscuridad y de por qué aterroriza a esta familia. Un detalle interesante es que esta familia no es muy típica que digamos y terminará unida gracias a estos sucesos de terror.
Hace unos momentos comentabamos que la película logra a medias el cometido de ser una película de terror, lamentablemente esto es cortado por algunos guiños medio cómicos y hasta de romance, nos hubiera encantado que toda la cinta nos estresaran con el tema central. Las actuaciones son buenas dentro de lo que cabe, al igual que la ambientación y sobre todo el sonido. Eso sí, podemos asegurar que en ciertos momentos saltarán de la butaca del cine ya que cuenta con escenas bastante dinámicas y que nos tomarán por sorpresa.
Cuando Las Luces Se Apagan marca una buena historia de la cual se puede desarrollar una secuela (incluso ya está confirmada), basada en el tema de la oscuridad. Esperemos que la secuela sea mucho más de miedo y se olviden de incluir toques fuera del género.