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En lo que unos fans se pelean porque los juegos supuestamente ya son woke y LGBT, y otros porque el DLC de Elden Ring fue nominado a juego del año, no están viendo el verdadero problema que atraviesan los videojuegos.

Amiguito. No tiene que ver con que Avowed tenga LGBT en su descripción de Steam, tampoco que falten las booth babes en los eventos de videojuegos. 

Hay algo por encima de todas las nimiedades de las que te quejas y es hora de explicarte que esto no se va a arreglar pronto. Porque para muchos, los videojuegos tal vez se vayan a volver algo más que un simple lujo.

Te acostumbraste a comprar videojuegos en línea

Desde antes del encierro que vivimos en 2020, muchos ya compraban harto videojuego desde plataformas en línea. Sobra decir de quienes hablamos. 

Estas comopañías hacen su negocio de la manera en que salen favorecidos. Ofrecen el mejor precio – a veces con pérdidas – para tratar de mantenerte cautivo. Incluso pagas la suscripción para que los envíos te lleguen al día siguiente.

Tiendas en línea donde puedes comprar videojuegos

Ahora, todo era bonito hasta que, el partido en el poder, se le ocurrió la idea de hacer que estas tiendas paguen más impuestos. 

En el papel, pues es lo ideal. Más dinero tienes, pagas más impuestos, pero, a estas empresas realmente se les cobra una bicoca en cuanto al tema de contenedores y almacenamiento de producto.

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Las tiendas en línea van a tener que pagar impuestos

El chiste es que el partido en el gobierno no quiere que se dejen de recaudar 15 mil millones de pesos anuales por toda esa mercancía que se mueve en el año.

Se supone que las tiendas “van a absorber esto”, sin embargo, ya sabemos que el usuario será el que termine pagando. 

Los simpson pagando impuestos

Volvamos a los videojuegos. ¿Te preocupa que sean LGBT? Bueno, mejor prepárate porque un título nuevo de 1,300 pesos, podría subir a 1,600. Y los de 1,700 igual ya rayarían en los 2 mil.

Todo lo que volvía cómodo a esas tiendas en línea, pues puede que se vaya por la borda. Especialmente con las chinas, porque esas mueven una cantidad irreal de productos – que no tienen que ver con videojuegos -.

¿Volver a las tiendas físicas de videojuegos?

Las tiendas físicas, esas que venden pura figura de acción, tal vez empiecen a aprovechar la situación, porque finalmente, estas medidas incentivan a que salgas y compres en tiendas, lo cual está bien.

Pero, volvamos a las cadenas de distribución. ¿Cuál vas a preferir? La de las tiendas establecidas o el mercado gris. Muchos dirán que el local con olor a chicle es el ideal y que los puestos del centro son desleales. 

Pero adivina. Finalmente, la distribución de los videojuegos que llegan tanto a los minoristas de local de menos de 3 metros cuadrados como a las tiendotas, los distribuyen los individuos del mismo apellido. Así que ellos, pues serán los del beneficio final.

El regreso de Donald Trump

La cosa es que el tema no se termina ahí. Para nada. Cuando Donald Trump llegue al poder, estará a un par de órdenes de hacer que se impongan algunas cuotas arancelarias a una buena cantidad de productos electrónicos, incluidos los videojuegos.

El preciso copetudo de los Estados Unidos va a querer bronca desde los primeros minutos cuando llegue al poder y pues, muchas de sus decisiones van a afectar a los consumidores tanto de los de aguacate como electrónicos.

Donald Trump en los Simpson

Entonces. Si tu tenías ganas de un Nintendo Switch 2, en vez de que cueste 300 ahora valdría 450 dólares. Haciendo que pagues más de 10 mil pesos por ese ansiado pedazo de hardware.

Los videojuegos y demás electrónicos podrían encarecerse muy feo. Y el usuario final, osease tú, pues será el que termine pagando los platos rotos.

Ya no se ve tan descabellado que ese GTA 6 vaya a costar 100 dólares y no porque Rockstar quiera, sino porque la cosa se puede poner fea.

Ojalá no vaya a pasar nada

Ahora, esperamos que este artículo envejezca mal y que no pase nada de lo que te acabamos de contar. Esa reforma arancelaria a los chinos que pretende Trump no va a favorecer a nadie.

Y pues, puede que sí le vayan a cobrar impuestos a los Amazonas y también temusheins porque la verdad, se les regala mucho espacio y a un precio de risa.

Y recuerda amiguito, como dice la ley de Murphy, cuando algo puede salir mal, saldrá mal. Eso se lo hubieran dicho a Sony con Concord, pero ya ni modo.  Esperemos que el 2025 no sea un año aún más complicado tanto para la industria de los videojuegos como para los gamers… No te pierdas de esta y más noticias en el Feed de TierraGamer en Google News. Sigue la conversación en nuestro canal de Discord.