Mononoke II: las cenizas de la ira llegó en agosto de 2025 al catálogo de Netflix. La segunda película de la trilogía nos presentó nuevamente al boticario en el Ōoku; si te gustó Los diarios de la boticaria, bueno, esto te resonará también, en un marco general. El nuevo filme es lo más emotivo que he visto de la saga y aquí te cuento por qué deberías darle una oportunidad a esta historia que te conmoverá, mientras también te enseña cosas de la cultura japonesa al estilo Dan Da Dan.
El fabuloso boticario regresa tan resuelto como siempre. Su rebeldía no nos permite ver su transformación durante mucho tiempo, sin embargo, la animación general de la entrega es tan deliciosa, nunca te defraudará, estamos ante: ¡un desfile de yurei te quitará el aliento!
Originalmente, la saga de Mononoke es una especie de spin off de Ayakashi: Samurai Horror Tales, cuyo misterioso protagonista se mantiene con la sabiduría y decisión habitual. El marco general de la historia se mueve siguiendo a un boticario que posee una espada especial que se encuentra sellada.
Sin embargo, incluso así, percibe a los mononoke. Además, sólo puede ser desenvainada por el boticario —siempre hace referencia a que sólo ellos pueden sostenerla, es excesivamente pesada para los demás. No obstante, no sabemos si se refiere a que existen más boticarios en este espacio-tiempo de la narración o si se relaciona con una especie de clan vivo que va por Japón y entonces tiene “compañeros de oficio”—.
Añadido a ello, hay otras condiciones, además del linaje del portador, para desenvainar la espada. El boticario debe descubrir la forma, la verdad y la razón de la creación del mononoke, de esta manera, la espada brinda su hoja para acabar con él bajo cierto régimen de justicia.
La última película Mononoke II: las cenizas de la ira (2025) sucede luego de los hechos en el Ōoku de Mononoke the Movie: fantasma bajo la lluvia (2024). El cierre de la saga, con un último filme, se proyectó para 2026.
Mononoke II: las cenizas de la ira se estrenó en Netflix el 14 de agosto de 2025; es un filme que fue nominado en el festival de animación Annecy; y se coronó con el Premio de Bronce de la audiencia a la mejor película de animación en el Festival Internacional de Cine Fantasía de Montreal.
Mononoke II: las cenizas de la ira es una entrega de Toei Animation (Dragon Ball, One Piece) cuya saga ha sido reconocida por la narrativa profunda y la animación folclórica pulida.
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¿De qué se trata Mononoke II: las cenizas de la ira?
Mononoke: las cenizas de la ira, una historia dentro de un Ōoku: mujeres, fantasmas y poder
Mononoke II: las cenizas de la ira continua la historia en el Ōoku, sin embargo, ahora que la anterior regente murió, buscan a una nueva persona para el cargo. Eligen a Botan, la hija de una de las familias más importantes, que además, es concubina de alto rango.
No obstante, hay una situación particular en el Ōoku: Fuki, la hija de un mercero, es la favorita del emperador, así que las chicas comienzan a impacientarse, ya que la favorece, no se explican por qué. Sienten envidia de lo que podría conllevar esta situación, otras personas dentro del palacio temen tener un heredero “indigno”, proveniente de un “mal” linaje.
Por otro lado, con respecto al protagonista: se encuentra en “problemas” (no que le interese); ahora que la anterior regente murió, el pase al Ōoku del boticario caducó, pero no puede marcharse debido a que, la espada sigue en movimiento, lo que quiere decir que hay un mononoke vagabundeando. Por ello, se queda en la puerta intentando estar al pendiente, llega el momento en que el guardia que presenció al fantasma bajo la lluvia, lo deja pasar, pese a los problemas que enfrentarán al “profanar” el Ōoku, debido a que considera que debe priorizar la seguridad del espacio.
Por su parte, Fuki, la concubina, no sabe de la existencia del mononoke que la persigue, ya que tiene problemas más inmediatos: se siente agredida, en peligro: lo está, por varias razones, menos por la única que considera, ya que Botan no es su enemiga; sin embargo, ella lo percibe así luego de que Botan asuma el cargo del Ōoku y prohiba que las mujeres conversen durante las “tareas nocturnas”; y también vuelve a instaurar la forma clásica y segura de buscar a un heredero: las concubinas se turnarán por noches para realizar las tareas nocturnas.
Ante esto, Fuki lo toma como una falta directa y estalla. Le dice que sólo lo hace para molestarla, ya que ella es la favorita del emperador. Sin embargo, Botan le dice que no es así, ese método milenario siempre ha estado presente y con él se busca que existan suficientes candidatos a seguir la descendencia del emperador. Le cuestiona que pasaría si la mujer favorita del emperador es infértil.
En ese momento, Fuki pierde el control, sabe que todas la mal miran porque no es de una familia importante como las demás concubinas. Debido al estrés comienza a vomitar y los temores de todas se hacen realidad: está embarazada. La vida de Fuki, entre envidias y dilemas, corre peligro. Eventualmente, su padre y su hermano le piden que renuncie al Ōoku y en determinado momento, incluso que aborte, sin embargo, ella desea a su bebé y dice que no cederá.
Las intrigas comienzan en el Ōoku, una de las concubinas elabora un plan para que parezca que Fuki rompió una regla importante (escribirle al emperador para que la favorezca), intenta provocar represalias duras, irrevocables. Por otro lado, el padre de Botan actúa de una manera egoísta y apoya el plan injusto de la concubina, ya que no desea que el linaje se “ensucie”. Sin embargo, Botan es justa y planea proteger la descendencia del emperador por sobre todas las cosas: le importa la nación; aunque Fuki no lo comprenda en su momento.
Por otro lado, el boticario se infiltra en el Ōoku y descubre la historia de Suzu. Otra concubina que se encontró en el mismo lugar desfavorable que Fuki; también fue instada a abortar por su ascendencia, aunque ella sí cedió a la presión y bebe un veneno por “voluntad” propia. En el presente, también intentan envenenar a Fuki, y de hecho, mientras tiene una crisis, escucha “es imperdonable” en un bucle susurrante y angustioso; y despierta empapada en sudor.
Más tarde, el boticario escucha que el fuego está prohibido en el Ōoku porque hace tiempo Suzu murió incinerada. Y de hecho, la mujer que intentó envenenar a Fuki murió de la misma manera, él llegó muy tarde para ayudarla. Ante esta situación, llega el momento de enfrentarse a Botan, quien en principio, le prohibe la entrada, sin embargo, el guardián de las puertas intercede por él, ya que es el único que puede salvar al Ōoku de una crisis, aunque Botan aún no reconozca la situación.
Pronto, el boticario se da cuenta de que las llamas que acaban con las personas dentro de Ōoku son hijas de Hinemizu… y la historia comienza a revelar los secretos que podrían salvar a Fuki y al Ōoku mismo.
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Mononoke: ¿quién es Hinemizu?
En Mononoke II: las cenizas de la ira, Hinemizu es el ratón de fuego, protector de los partos. Por ello es que pequeñas llamas que asemejan ratoncitos de flamas, devoran a las mujeres que comienzan a atentar contra la vida de los embriones, también contra aquellos que quieren lastimar a la madre.
En esta nueva historia del Ōoku, Suzu se culpa y genera un rencor hacia sí misma por no proteger a su bebé, todo lo contrario a Fuki que decide arriesgar todo (su vida y la de sus familiares) por defender la existencia y seguridad de su bebé.
Fuki recibe la ayuda de Botan, incluso cuando esta concubina de alto rango se entera de que su padre es corrupto y le ordena obedecerlo. Pese a todo, Botan opta por proteger a Fuki.
Después de todo, todos se percatan del por qué y cómo nació Hinemizu: a partir de un sentimiento complejo de culpa y dolor. Suzu no pudo sobrevivir a su decisión de sacrificar a su bebé.
¿Por qué ver el filme?
Es un retrato sororo demasiado hermoso, en medio de una política áspera del Ōoku, como nos presenta Maomao en Los diarios de la boticaria, se forja una nueva protección. El final es una belleza que llegará al fondo de tu corazón, a través de la pulida animación.
Botan protege a la madre del bebé que es hijo del emperador y Fuki finalmente comprende la visión que posee Botan acerca de la supervivencia del linaje por su país. Ambas crean un nuevo vínculo, y aprenden mutuamente de sus formaciones y del lugar que ocupan para que su sociedad sobreviva, añadiendo el hecho de que son mujeres vulnerables y subyugadas, pero se percatan de que juntas pueden adquirir un poder distinto y así, un apoyo que les permite mantenerse a salvo en un espacio agresivo y sumamente competitivo.
Además, se ilustra de manera trágica pero sublime lo que llevo a Suzu a generar una culpa agobiante que cambió por completo su esencia, da cuenta de los desafíos de las mujeres desde tiempo antiguos y que suelen imponerse hasta el día de hoy.
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