Los juegos de realidad virtual (VR, por sus siglas en inglés), todavía siguen estando reservados para un público muy específico; de hecho, pocos estudios triple A se aventuran a crear algo para estas plataformas.
Afortunadamente, existen desarrolladores que saben explotar las capacidades de estos entornos virtuales, y Vertigo Games, los creadores del exitoso Arizona Sunshine, decidieron emprender una nueva aventura con mucha acción.
After the Fall llega a PlayStation VR, PC y Oculus Quest 2 para darnos una experiencia cargada de emoción, estrés y convivencia con amigos que te describimos a continuación.
El juego nos traslada a un escenario postapocalíptico en donde el frío ha tomado las calles, dando origen a una extraña raza de enemigos conocidos como ‘snowbreeders’, quienes acechan a los pocos supervivientes.
Como jugador, tomas el rol de un runner, cuya misión es salir a la ciudad y asesinar a unos cuantos zombis helados antes de volver a casa.
Para que estas misiones sean un poco más sencillas, cuentas con un arsenal de armas que se puede expandir encontrando diskettes perdidos en cada nivel, y si esto no fuera suficiente, también puedes mejorarlas.
Una campaña corta pero con futuro
Si jugaste Left 4 Dead entenderás cómo funcionan las mecánicas. Tu misión es sobrevivir a un total de 5 niveles en los cuales te enfrentarás a hordas de enemigos que pueden aparecer desde diferentes lugares.
Aunque los recorridos son los mismos cada vez, el tipo de snowbreeders y su localización, así como los eventos, pueden varias en cada sesión de juego, lo que le da cierto toque de rejugabilidad.
Lamentablemente, las variantes de enemigos son pocas y la campaña se hace demasiado corta, ya que cada nivel se completa en alrededor de media hora, dependiendo de si juegas con otros usuarios o con bots.
La buena noticia es que Vertigo Games confirmó la llegada de nuevo contenido próximamente, pero por el momento el juego se siente algo limitado.
En cuanto a la dificultad, existen cuatro disponibles que pondrán a prueba tu habilidad y coordinación, aunque también te otorgarán recompensas mayores mientras sea más alta.
After the Fall es preciso, casi todo el tiempo
Una de las cuestiones que siempre salta en un juego de realidad virtual es la precisión de la detección de movimiento, y al menos en la versión de Oculus Quest 2 es muy buena.
Desde el principio te piden configurar la altura y el ancho de tu bolsa de municiones, la cual puede subirse, bajarse o hacerse más ancha dependiendo tu tipo de cuerpo. Este paso es importante, ya que determinará la facilidad que tendrás para recargar o cambiar armas.
En total cuentas con dos espacios, cada uno a un costado, y dos ranuras de equipo ubicadas en los guantes, así que tienes que hacer varios movimientos para usarlos.
La verdadera prueba de fuego llega con el sistema de recarga. After the Fall cuenta con dos formas de hacerlo, una sencilla para una experiencia arcade y otra realista que te pide liberar el cartucho, tomarlo de tu inventario, colocarlo y cortarlo.
Si configuraste bien tu bolsa de municiones no tendrás inconveniente, pero si no, te la pasarás tomando armas por error y muriendo por no poder recargar rápidamente.
Mucho grindeo que se hace repetitivo
Hace un momento te mencioné que podías ampliar tu arsenal. Esto hace más sencilla tu supervivencia, pero tampoco hay mucho que desbloquear.
En total hay seis armas con poco más de 15 piezas para cada una para potenciar su ataque o mejorar su estabilidad, y créeme, son de mucha ayuda, pero necesitarás jugar una y otra vez para encontrarlas.
Esto puede ser negativo si eres de los que se aburre rápido, ya que cada nivel muestra un recorrido lineal que se hace tedioso después de cierto tiempo.
Un multijugador divertido pero muy limitado
Si lo tuyo no es trabajar en equipo, también puedes dispararle a otros jugadores en un modo PvP, aunque tampoco tiene mucha emoción, ya que cuenta con dos mapas donde ocho jugadores se enfrentan entre sí.
Si no fuera por la cantidad limitada de escenarios, esta opción podría ser muy ganadora, así que recomendamos esperar a que se expanda el contenido.
After the Fall tiene buenas bases
Esta nueva apuesta de Vertigo Games funciona bien a nivel global, aunque su falta de contenido se convierte en su peor defecto.
La campaña se puede terminar en alrededor de tres horas, en las cuales verás enemigos que se vuelven repetitivos y cuyas habilidades no son suficientes como para hacerte temblar.
La cantidad de veces que debes repetir los escenarios para desbloquear todo el contenido es excesiva, así que necesitas mentalizarte a ello o armar una reunión virtual para bromear con amigos mientras juegas.
Esperaremos ansiosos la implementación de nuevo contenido, ya que seguramente mejorará la experiencia.
¿Marea o no?
Afortunadamente, los desarrolladores implementaron herramientas de personalización que ayudan a combatir el famoso motion sickness, así que puedes elegir la forma de desplazamiento que más se acople a ti.
Lamentablemente hay dos grandes defectos: el primero es que al desplazarte de un piso superior a uno inferior verás un cambio drástico que no corresponde con el movimiento natural, y el segundo tiene que ver con los muros.
Si por alguna razón te pegas demasiado a una pared o estructura, el visor se pone negro y no te permite ver nada hasta que salgas de ahí, lo cual es un reto si no sabes donde estás.
Este último error me hizo morir en varias ocasiones, así que ten cuidado.
*Esta reseña se realizó en Oculus Quest 2.