Dear Me, I Was…
Overall
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Mecánicas de juego - 50%50%
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Historia - 70%70%
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Música - 90%90%
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Gráficos - 70%70%
Summary
Dear Me, I Was… es una experiencia breve, íntima y visualmente cautivadora que confirma que los videojuegos pueden emocionar sin depender de la acción. Arc System Works y Taisuke Kanasaki nos invitan a un viaje introspectivo donde la historia, la música y el arte se entrelazan para recordarnos que lo cotidiano también puede ser profundamente humano.
- Genero: Aventuras
- Plataforma: Nintendo Switch 2
- Estreno: 31/07/2025
- Publicador: Arc System Works
- Desarrollador: Arc System Works
Por años —décadas, incluso— existe la eterna discusión sobre si los videojuegos son arte y hasta qué punto pueden expresar emociones. Mientras algunos títulos cumplen únicamente con su función de entretener (Plants vs Zombies, te he dedicado más tiempo del que me gustaría confesar), hay otros que buscan hacernos sentir algo, incluso si eso implica sacrificar parte de su jugabilidad.
En esta ocasión, tuvimos la oportunidad de experimentar una obra proveniente de la mente artística de Taisuke Kanasaki —conocido por sus icónicas aventuras Another Code y Hotel Dusk—, ahora bajo el sello de Arc System Works para Nintendo Switch 2.
Su nuevo proyecto, Dear Me, I Was…, sigue la línea de historias emotivas con un estilo visual muy característico, fiel al toque melancólico del creador.
Dear Me, I was es una aventura más emocional que interactiva
El género de las aventuras visuales ha marcado generaciones enteras. En esencia, estos juegos se centran en presenciar una historia y tomar decisiones que afectan el desarrollo narrativo, ofreciendo una experiencia inmersiva pero más contemplativa.
Sin embargo, Dear Me, I Was… propone algo diferente: una experiencia más cercana a una obra audiovisual que a un videojuego tradicional. Desde su inicio, el título deja claro su enfoque: es una historia con un énfasis en la dirección de arte que te guía a través de distintas emociones con una dirección artística espectacular.

A pesar de la emotividad de su narrativa, surgen dudas sobre qué tanto busca ser un videojuego realmente interactivo. La historia está dividida en capítulos que se disfrutan de forma lineal, pero no pocos te permiten interactuar con el mundo que construye.
Cuando existe interacción, esta se limita a acciones mínimas como mover el cursor o tocar la pantalla para revelar una imagen. Como alguien acostumbrado a las aventuras visuales, el nivel de interacción se siente mínimo, conceptual, casi inexistente.

En muchos sentidos, Dear Me, I Was… se acerca más a un corto animado interactivo de unos 50 minutos. Las decisiones tienen un impacto marginal —una o dos afectan ligeramente el epílogo—, pero no alteran el rumbo general de la historia.
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No esperes acertijos ni finales alternos
Conviene aclararlo: este no es un juego de aventura narrativa en la línea de populares juegos como Ace Attorney o incluso el interactivo Black Mirror: Bandersnatch. Aquí no hay acertijos, elecciones complejas ni múltiples finales. Solo se trata de dejarse llevar por una historia que se desarrolla frente a ti, sin grandes sobresaltos.
Narrativamente, Dear Me, I Was… es un slice-of-life en toda regla. Sigue la vida de una persona común y corriente: sus dificultades, emociones y altibajos. Aun cuando algunas escenas logran conmover, el título no busca una reflexión profunda ni mensajes ocultos.

Y ahí radica su encanto: no pretende ser más de lo que es. Simplemente te recuerda la belleza —y la tristeza— de la vida cotidiana, con sus pequeñas victorias y derrotas.
Al final del día, Dear Me, I Was… podría interpretarse como una demo técnica o un experimento narrativo del equipo detrás de Kanasaki-san. Su duración de menos de una hora y su jugabilidad casi inexistente dificultan recomendarlo ampliamente.
Sin embargo, su bajo precio y su impresionante apartado audiovisual lo convierten en una opción ideal para quienes buscan una noche emotiva y contemplativa, más cercana a ver una animación poética que a jugar un título tradicional.
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Jugamos Dear Me, I was… en Nintendo Switch 2 con un código proporcionado por un representante de Arc System Works en nuestra región.


