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Un RPG de diseño robusto, con un tono clásico y una historia inolvidable que solo Level-5 podía desarrollar.

Ambicioso es la primera palabra que me viene a la mente cuando quiero describir Ni no Kuni II: Revenant. Su diseño de personajes, narrativa y mecánicas de juego vuelven a este título de Level-5 en uno de los videojuegos más robustos y completos para 2018. Durante un momento es un título de acción RPG, después resuelves varios puzzles y luego estás metido en un RTS muy básico, pero, al mismo tiempo, entretenido. El ambiente te atrapa de inmediato y te lleva de la mano por una historia llena de sorpresas y aventuras. Es un excelente ejemplo de cómo una propuesta se diversifica por dentro y permite a los usuarios disfrutar de producto que vale cada centavo.




Los paisajes de Ni no Kuni son impresionantes, llenos de vida

El inevitable golpe de estado

Ni no Kuni II: Revenant Kingdom cuenta la historia de un niño con una actitud muy inocente llamado Evan. Su deseo es unir a las naciones y sus distintas razas bajo una bandera, sin embargo, los intereses de otro grupo se interponen y provocan un golpe de estado. Lo interesante detrás de este personaje radica más en sus ganas de resolver los conflictos en vez de buscar venganza. Su falta de experiencia y malicia en vez de volverlo vulnerable, provocan que brillen sus valores y fortalezas. Con eso en mente, vemos cómo un protagonista desarrolla su historia con base en ayuda a sus semejantes y no actuar como un gobernante de puño de hierro que no aporta nada a su pueblo. Es un bonito ideal el cual no se ve mucho en los videojuegos.

Gracias a un personaje como Evan, disfrutamos una historia fantástica donde el héroe se topa con obstáculos realmente complicados de superar. La paz y ayudar a los demás son parte de ese motor el cual lleva a este chiquillo con orejas de cachorro y peinado de Príncipe Valiente a alcanzar sus metas sin importar la barrera enfrente. Con estas aspiraciones, derrotarás peligrosos enemigos los cuales también se unirán a tu causa para acabar con el conflicto y crear un nuevo reino. Sí, es un cliché, pero muy bien argumentado, con bases y completamente justificado. Los jugadores encontrarán este apartado muy valioso, pues no sentirán que pierden el tiempo.

Hay una gran variedad de reinos con distintos temas.

Ni no Kuni II: Revenant Kingdom va a la segura, tiene momentos que se hilan uno tras otro. Primero te atrapa un grupo de piratas del aire y después estás consiguiendo materiales para desarrollar una ciudad en un asentamiento. Después, visitas una ciudad cuya vida diaria gira alrededor de tirar los dados para decidir cuánto subirán o descenderán los impuestos. La variedad en los reinos no se detiene ahí, también hay lugares donde el amor y toda clase de muestra de afecto están completamente prohibidos. La exploración de la diversidad entre cada pueblo es algo que planeta muy bien el juego. Si vas a gobernar, debes entender que será para todos y no solo para unos cuantos como llega a suceder en el mundo real y, la verdad, lo primero que buscas en un título de esta clase escapar de lo mismo de siempre.

A luchar por los ideales y valores que guían el camino de Evan

Un RPG no depende más de una buena historia y diseño de personajes. Debe contar de un sistema de juego atractivo y moderno. En estos momentos es sumamente complicado tener un juego tradicional por turnos a menos que seas Dragon Quest, Pokémon y tal vez Yo-Kai Watch. Ni no Kuni II: Revenant Kingdom apela más por mecánicas como las de la serie “Tales of” o “Star Ocean” donde los combates son más de acción. Lo interesante es que a veces pueden ser encuentros en tiempo real o en un cambio de pantalla dependiendo la situación. Esto da identidad al juego y lo vuelve más amigable a los jugadores que no conocen Ni no Kuni.

Los controles son más o menos básicos. Tienes un par de ataques, movimientos especiales, técnicas por aprender. El combate se reduce a los embates a distancia y de cerca. Este último apartado no es realmente profundo pues puedes pelear de cerca y no pasa nada. La defensa también es muy básica pues solo necesitas bloquear y esquivar. Ahora, todo suena muy simple, sin embargo, es esa sencillez la que te mantiene pegado al control. No es que todo lo resuelvas con un solo botón, pues puedes ejecutar una gran variedad de combinaciones, pero, el título no deja de sentirse familiar y entretenido.

Los personajes secundarios aportan muchos elementos a la historia

A esto debemos añadir unas pequeñas criaturas que tal vez no afectan por completo al juego, pero sí nutren la experiencia. Son una serie de diminutos personajes son seres que solo tú puedes ver. Parecen un tributo a los Kodamas de la Princesa Mononoke, pero mucho más útiles, tiernos y de varios colores. Unos sirven para curarte durante los combates, otros atacar con un pequeño cañón y el resto para usar magia negra y despachar a la mayor cantidad de enemigos. En el papel, las criaturas saturan la pantalla, sin embargo, también aportan y hacen las fases mucho más ágiles.

Para englobar el tema de los combates, el rey deberá enfrentar a peligrosos monstruos, dirigir pequeños grupos armados durante escaramuzas y luego desarrollar una enorme ciudad para comenzar el nacimiento de un reino el cual tendrá un gobierno incluyente. Sí, este título cuenta con un fuerte mensaje político detrás de su contexto. Por otro lado, también te acompañan otros dos personajes en el campo de batalla los cuales combaten en automático y, la mayoría de las veces, por sobrevivir. Ahora, existe una herramienta para ajustar cómo y con qué atacan tus acompañantes. La realidad es que este apartado no influye mucho en la experiencia de juego, puedes dejarlo pasar y el título se desarrollará sin problemas. Luego viene el tema del “grinding” si de plano no tienes la paciencia para “levelear” lo mejor es que te alejes de este juego.

La importancia de construir un reino desde cero

Otro pilar que sostiene Ni no Kuni II es el de la construcción del Reino de Evan. Como lo mencioné antes, te instalas en un asentamiento y comienzas a construir un pequeño reino. Lo interesante es que no inicias de inmediato con pequeñas cabañas de madera o casas de adobe, comienzas con viles casas de campaña y algunas bardas de madera. De ahí debes conseguir materiales para construir ese reino. Ahora, esto no se vuelve en un “mini” Sim City, sin embargo, tiene muchos elementos que te pondrán a trabajar un poco más, fuera del juego principal.

Sí, Ni no Kuni II tiene un RTS muy básico y valioso para la experiencia

En este apartado también interviene mucho el tema de juntar ciudadanos y también juntar fondos económicos, pues, una ciudad no se construye sola o de la caridad. Por eso el juego de pronto se vuelve en algo realmente robusto. Incluso sientes que subir de nivel y conseguir armas es un tema por lo más diminuto. Ahora bien, la historia cuenta con diálogos muy amigables, su humor es realmente tranquilo, incluso inocente. Los personajes secundarios siempre tienen algo interesante que contar, incluso mucho más que los protagonistas del juego.

Música y gráficos para recordar por años

La música es un apartado de gran valor dentro de Ni no Kuni II: Revenant Kingdom pues su composición corrió a cargo del maestro Joe Hisaishi, el creador de los temas más reconocidos de las películas de Studio Ghibli. Por lo general vemos temas que te llevan por un mundo lleno de fantasía, espadas y seres mágicos. Luego tenemos el tema de los gráficos los cuales están muy bien cuidados y aprovechan perfectamente la potencia del PS4 y PC, el problema radica en que hay algunas animaciones y actuaciones de voz en inglés que tal vez no estén muy bien hechos. Incluso sientes que este apartado está tosco o pesado.

Ni no Kuni II: Revenant Kingdom es un título robusto, con una gran cantidad de elementos los cuales sirven para brindar variedad a la experiencia de juego. Es impresionante cómo llegas a perder tanto tiempo a la hora de construir tu reino sin la necesidad de descuidar la historia principal. A eso debemos añadir que la historia es larga, pero muy ágil, fácil de seguir. Justo cuando acaba un hilo, empieza otro y siempre sobre la base establecida que trata sobre recuperar y crear un reino pensado en todos los habitantes del mundo.

Crear un reino será una tarea muy complicada

Sí, es una propuesta muy grande, pero, como pocas veces, nunca se siente aburrida, incluso las primeras 25 horas se pasarán como agua. El único punto flaco de Ni no Kuni II es el de subir de nivel y desarrollar habilidades pues la estrategia es mínima para ser un RPG. Ojo, no es aburrido manejar a las pequeñas criaturas o combatir en tiempo real contra los enemigos, es más bien un tema repetitivo al punto del abuso y eso ya no está bien.

Ni no Kuni II: Revenant Kingdom, sin lugar a duda, es uno de los juegos más importantes del año y vale la pena que le des una oportunidad, en especial si te gusta jugar títulos muy largos con más de 70 horas de duración.

Calificación: 9

  • Las animaciones se ven increíbles
  • Joe Hisaishi hizo un gran trabajo con la música del juego
  • Una historia que se conecta de un modo muy claro
  • Los personajes secundarios siempre tienen algo que contar
  • Un enorme mundo por explorar y desarrollar

Minus Tierra Gamer

  • Los protagonistas requieren un poco más de desarrollo
  • Las mecánicas se sienten repetitivas y con variantes que no sirven de mucho