La franquicia Dying Light: The Beast sigue expandiendo su universo con nuevas localizaciones llenas de historia y detalles inesperados. Entre ellas, destaca Castor Woods, una región boscosa donde la naturaleza, la historia y el terror se mezclan para ofrecer a los jugadores una experiencia diferente. Y para darle un giro sorprendente al survival horror, este lugar cuenta con un anfitrión muy especial: Bober el Castor, la simpática mascota oficial del valle.
¿Quién es Bober y qué hace en un juego de survival horror?
Al llegar a Castor Woods, lo primero que encontrarás es un mensaje de bienvenida firmado por Bober el Castor, quien se presenta como tu guía turístico. Con un tono amigable y casi cómico, Bober invita a los visitantes a relajarse y disfrutar del aire fresco, asegurándoles que las vacaciones en Castor Woods serán inolvidables.
Pero su aparición va más allá de ser un simple elemento decorativo. En palabras del director de la franquicia, Tymon Smektała:
“Mientras trabajábamos en el mundo de Dying Light: The Beast, queríamos que estuviera lleno de historias ocultas y pequeños detalles interesantes que hicieran que el mundo se sintiera más vivo e inmersivo. En un momento dado, nuestros artistas propusieron la idea de incluir castores en la construcción del mundo, y nos encantó. Lo que empezó como un pequeño detalle ambiental se convirtió rápidamente en algo mucho más grande…”
Con esta decisión creativa, Bober se transformó en un símbolo de la región y en un personaje que, aunque adorable, esconde pistas sobre los secretos que aguardan bajo la superficie de Castor Woods.

La historia detrás de Castor Woods
La directora de arte, Katarzyna Tarnacka-Polito, explicó cómo surgió la conexión entre la región y los castores:
“Parte de las localizaciones de Castor Woods están inundadas. Cuando empezamos a preguntarnos por qué, nuestras lluvias de ideas nos llevaron a los castores. Creamos una historia de fondo: el valle de Castor Woods siempre ha sido el hogar de una gran población de castores. Sin humanos que los controlaran, modificaron el curso de los ríos y el valle se inundó. A partir de ahí, seguimos ampliando la idea…”
Según la narrativa oficial, hace años, una colonia de castores salvó el valle de una gran inundación construyendo una presa gigante. Desde entonces, estos animales se convirtieron en los guardianes simbólicos de la región, y su imagen está presente en estatuas, carteles, logotipos de empresas locales e incluso en el escudo de armas de Castor Woods.

Este trasfondo aparentemente inocente esconde, sin embargo, misterios bajo tierra, que el jugador deberá descubrir a medida que avanza en la historia.
Un refugio turístico… o algo más
Aunque Bober presenta Castor Woods como un paraíso natural lleno de encanto, los desarrolladores han dejado pistas que indican que este lugar no es tan idílico como parece. El tono amistoso del castor contrasta con los horrores que se esconden en las zonas más profundas del valle, especialmente en las áreas inundadas y subterráneas, donde los secretos del Mare Jivari cobran vida.
La combinación de un personaje entrañable como Bober con el tono oscuro y opresivo de Dying Light: The Beast crea un contraste inquietante que añade un nuevo nivel de inmersión y narrativa ambiental.
Un mundo más vivo y con identidad propia
El equipo de Techland ha confirmado que Castor Woods no solo es una localización más, sino una región pensada para reforzar la sensación de un mundo orgánico y vivo. La presencia de elementos culturales como el folklore de los castores hace que este espacio se sienta real, con tradiciones, símbolos y una historia propia que va más allá de ser un simple escenario.
Incluso en los rincones más oscuros, los jugadores encontrarán referencias a los castores: desde graffitis en las paredes, nombres de negocios locales y souvenirs, hasta estatuas abandonadas y desgastadas por el tiempo. Todo esto refuerza la idea de que Bober y sus semejantes son el espíritu de Castor Woods, un espíritu que quizá tenga más relevancia en la trama de lo que aparenta.
Lo que nos espera en Castor Woods
Dying Light: The Beast lleva a los jugadores a explorar un lugar donde la naturaleza y el terror se mezclan. Con la guía de Bober el Castor, conocerás la historia oculta del valle, descubrirás las consecuencias de un ecosistema sin humanos y te enfrentarás a las amenazas que acechan bajo las aguas de Castor Woods.
¿Será Bober un simple alivio cómico en medio del horror, o su papel será más profundo en los secretos del valle? Eso es algo que los jugadores deberán averiguar por sí mismos mientras se adentran en esta inquietante pero fascinante región.
Dying Light: The Beast demuestra una vez más que el horror puede ir de la mano con la creatividad y la narrativa ambiental. Castor Woods y Bober son prueba de que incluso en un juego de supervivencia y terror, hay espacio para la sorpresa y el detalle cultural que hacen que el mundo cobre vida.
¿Estás listo para dejarte guiar por Bober y descubrir qué secretos se esconden en Castor Woods? No te pierdas de esta y otras noticias de videojuegos suscribiéndote a nuestro feed de Google News.


