Los videojuegos son un chivo expiatorio para justificar a un grupo específico
En los últimos años los videojuegos han dado mucho de qué hablar en Estados Unidos, pues han sido acusados de provocar comportamientos violentos que han derivado en tiroteos.
El debate sobre estos señalamientos ha provocado diversas discusiones, pues todo parece indicar que algunos grupos pretenden quitar la responsabilidad a la venta indiscriminada de armas.
Curiosamente, un reciente estudio reveló que estas acusaciones en contra de los videojuegos derivan de un problema racial, pues solo se ha hecho escándalo de ello cuando los atacantes son blancos.
Patrick Markey, psicólogo de la Universidad de Villanova, Pensilvania, publicó recientemente un estudio en la revista Psychology of Popular Media Culture, en la cual señala que los videojuegos solo son culpados cuando los atacantes son blancos.
Un problema racial
Para llegar a esta conclusión se realizaron dos pruebas. La primera involucró a 169 estudiantes a los cuales se les entregó una noticia sobre un tiroteo en donde se mencionaba que el responsable era consumidor de videojuegos.
La mitad de los participantes recibió una versión con un atacante blanco y los restantes con un atacante afroamericano.
Al preguntarles si creían que los videojuegos habían tenido algo que ver, la mayoría respondió de forma afirmativa solo con el atacante blanco.
La segunda prueba consistió en una investigación bibliográfica que involucró más de 200 mil reportes noticiosos derivados de 204 tiroteos.
El primer resultado fue que la mayoría de ellos habían sido realizados por blancos, contabilizando un total de 131 atacantes contra 73 afroamericanos.
Esta prueba reveló que en el 6.8% de los incidentes escolares se culpaba a los videojuegos cuando el atacante era de piel blanca, mientras que en el resto de casos solo se mencionaban en el 0.5% de las veces.
Patrick Markey aseguró que no hay evidencia suficiente que permita señalar a los juegos de video como responsables de alguna conducta violenta; sin embargo, el estudio concluyó que son usados para justificar a algunos atacantes.
Parece que todavía hay muchos estigmas que rodean a los videojuegos, y lamentablemente, las armas siguen sin recibir la atención necesaria.
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