Una encuesta reciente por parte de Motorola arrojó datos muy interesantes sobre el consumo de los smartphones en México.
Motorola llevó a cabo una encuesta a 34 mil personas para averiguar qué tan enganchados están los mexicanos a sus dispositivos móviles. De acuerdo con los resultados, 52% escogió el teléfono.
Con esto, Motorola encontró que el mexicano es dependiente del teléfono, por ejemplo, el 40% de los encuestado tiene una gran ansiedad cuando la batería de su móvil está por alcanzar el 10%.
El 21% de los mexicanos es dependiente del dispositivo y nunca lo apaga.
De ambos segmentos aparece un 32% el cual vive con su teléfono, pero no en él.
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Los smartphones puede ser una herramienta la cual puede agilizar la vida diaria de las personas, sin embargo, también es probable que causen una adicción o alguna clase de dependencia. Es como si la gente no pudiera dejar de portar un dispositivo en su bolsillo pues perdería cierta protección o compañía.
Por otro lado, hay otros datos los cuales muestran la importancia de los smartphones para los mexicanos: 43% tiene la curiosidad de saber qué pasaría durante un fin de semana si no tienen su teléfono y el 27% come con sus amigos con el aparato en la mesa y la pantalla visible.
¿Depender o no del teléfono?
IAB ha llevado a cabo varios estudios sobre el consumo de medios y dispositivos móviles entre los internautas mexicanos. En la edición 2017 se arrojaron datos muy interesantes los cuales vale la pena revisar.
Para 2016 se contabilizaron 71.5 millones de mexicanos conectados a Internet, 81% de los usuarios de Internet en México se conectan a través de un smartphone. El crecimiento de este dispositivo cambia la rutina del mexicano cuando lo mantiene conectado todo el día.
Del lado de la comunicación, la gente suele usar más sus dispositivos para estar en contacto con sus amigos en vez de los métodos más tradicionales. Lo mismo sucede con la música. ¿Pasará lo mismo con los videojuegos?
Como era de esperar, el consumo de video no ha dejado de crecer y es lo que más se ve en los teléfonos, incluso, la gente lo hace más entre las 6 de la tarde y la media noche.
Con esto podemos darnos una idea de que el mexicano se volvió en un dependiente de su teléfono pues ahí consume toda clase de contenidos de entretenimiento.