No toda la violencia está en el juego
El tema de la violencia en los videojuegos siempre causa debate, y con la salida de Mortal Kombat 11 la discusión volvió a tomar las redes.
Gran parte del encanto de esta saga radica en lo gráficas que llegan a ser las lesiones, y constantemente, quienes no toleran este tipo de elementos son tachados de “blanditos”.
Lo que pocas veces se ponen a pensar, es que el proceso para llegar a mostrar los sangrientos movimientos no es fácil, y de hecho, a un desarrollador le causó estrés postraumático.
De acuerdo con un reporte de Kotaku, uno de los desarrolladores de Mortal Kombat 11, el cual decidió mantenerse en el anonimato, quedó tan impactado por la violencia del juego que fue diagnosticado con estrés postraumático.
El hombre habría trabajado desde 2018 en el desarrollo de las secuencias más violentas del juego, teniendo como tareas las de revisar las animaciones y mantener el contacto con los animadores para que todo saliera perfecto.
Lo que quizá no sabías, es que para tener resultados óptimos tienen que revisar escenas reales de lesiones, y es aquí donde empezó el problema.
Después de un mes de trabajo, el desarrollador comenzó a sufrir pesadillas que cada vez causaban más efectos negativos en su persona.
“Tenía estos sueños extremadamente gráficos, muy violentos. Simplemente deje de querer ir a dormir, así que me mantenía despierto por días para evitar hacerlo”.
El problema comenzó a progresar rápidamente, y fue entonces cuando decidió acudir a terapia, en donde le diagnosticaron con síndrome de estrés postraumático.
Esta condición no fue provocada por lo mostrado en el juego, sino por la impresión que le causó el material de referencia, el cual incluía fotos de escenas del crimen y hasta videos de animales destazados.
Muy pocas veces pensamos en el proceso mediante el cual se alcanza el nivel de realismo en la violencia de Mortal Kombat, y aquí tienes una prueba del costo que puede tener para los desarrolladores.
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