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Una rarísima mezcla de Pokémon, Yu-Gi-Oh! y Dragon Ball

Usar protección a la hora de tener relaciones sexuales es muy importante, pero los japoneses no entienden y deben aprender a usar un condón con este plagio de Pokémon. 

La marca de preservativos Okamoto Industries Inc. es una de las más populares en Asia y alrededor del mundo, sin embargo, hay cifras alarmantes que los obligan a tomar cartas en el asunto. 

De acuerdo a un reporte realizado por Japan Times, tan sólo en la región central de Kobe el número de embarazos no deseados aumentó considerablemente. 

Los adolescentes -aparentemente- no tienen consciencia sobre la protección en las relaciones sexuales, y por ello, han decidido incursionar en la educación sexual para mejorar el panorama. 

Un plagio de Pokémon para la educación sexual de Japón

Con el fin de aproximarse a las generaciones más jóvenes, se valdrán de una de las herramientas más poderosas que el ser humano ha creado: el anime

No es broma. Con un anime que parece un plagio de Pokémon mezclado con un poco de Caballeros del Zodiaco, buscan tener un impacto positivo en las audiencias de su campaña. 

Creemos que no necesitas entender japonés para entender el contexto. Tú sólo relájate y disfruta de lo que verás a continuación. 

Como puedes observar, son segmentos de animación cortos, con un diseño de personaje y animaciones que evocan a lo clásico de las series japonesas (…). 

Los personajes de esta serie son mayores de edad y son conocidos como Condom Battlers, que, por supuesto, promueven las relaciones sexuales 100% seguras. 

No cabe duda que Japón es bastante raro, pero entendemos que la educación sexual tradicional no siempre resulta ser tan efectiva. 

Personaje principal de Condom Battler Goro
Ash Ketchum no siempre iba a ser un niño de 10 años… Imagen: Okamoto Industries

Después de ver esta animación, por supuesto que tú también quieres ser un Condom Battle… ¿Verdad? ¿VERDAD?

Sabemos que si de bootlegs se trata, este plagio de Pokémon es uno de los más llamativos del mercado.

Valdrá la pena darle seguimiento y ver cómo resulta este esfuerzo por educar sobre las relaciones sexuales seguras a los jóvenes japoneses.

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