Las escenas más grotescas y pesadas dentro de Attack on Titan no siempre tienen que ver con los titanes acabando todo a su paso
No cabe la menor duda de que Attack on Titan pasará a la historia como una de las historias más destacadas de la última década. Tanto el anime como el manga resultan un par de productos rentables que generan mucho dinero a las compañías que lo licencian.
Ahora, el anime de Attack on Titan está disponible a través de servicios como Crunchyroll, mientras que el manga lo puedes leer – de un modo legal – tanto de forma digital como en físico gracias a varias editoriales que adquieren la licencia.
Asimismo, contrario al anime, el manga de AoT no ha parado su publicación y sigue contando la historia de Hajime Isayama. Obvio, al ser tan largo, nos hemos perdido de varios momentos clave del manga dentro del anime.
La carencia de estos momentos puede interpretarse como censura, pues realmente estamos hablando escenas que varios consideran fueran de lugar.
El momento en cuestión tiene que ver con el capítulo 63 del manga de AoT el cual nos muestra un particular forma de actuar por parte de Darius Zackly, un líder militar con una visión muy clara de cómo debe ser tratado el enemigo.
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¿De verdad es una escena tan grotesca la que se aprecia en el manga de Attack on Titan?
Durante el capítulo 63 del manga de Shingeki no Kyojin vemos cómo Darius Zackly tortura a un miembro de la monarquía de la isla Paradis de un modo muy cruel en el cual la persona deberá alimentarse con sus propias eses y orina.
La humillación no va a terminar ahí, pues también será expuesto al público al menos una vez al día para caer en la humillación. Ahora, ese momento de Attack on Titan obtuvo algunos ajustes en los países donde también ha sido publicado el tomo 16 del manga, llegando al punto de la censura, la cual no ocurrió en el anime.
Por otro lado, Shingeki no Kyojin está en la recta final de su historia. Se supone que el año que viene, cuando se estrene la última temporada en televisión, tanto el anime como el manga cerrarán al mismo tiempo en un hecho sin precedentes.