La obra de manga de Jujutsu Kaisen finalizó el 30 de septiembre de 2024, en el número 44 de la Weekly Shōnen Jump de Shuēisha. La entrega escrita e ilustrada por Gege Akutami —que fue serializada durante seis años— terminó de una manera interesante, después de tener un amplio arco de batallas. El desenlace fulminó como un rayo a todos los fanáticos.
La historia de fantasía oscura nos permitió seguir a nuestros queridos hechiceros durante bastante tiempo, sin embargo, todo llega a su final, en esta ocasión tocó despedirnos de la travesías de Yuji Itadori y compañía. Los jóvenes seguirán en el mundo de la hechicería y algunas nuevas reformas comenzarán a plantearse después de las situaciones que enfrentaron las familias más importantes, además de las propias autoridades de la organización, en el quiebre que puso en peligro al mundo: Sukuna, el rey de las maldiciones, “recuperando” su poder.
El arco de Shinjuku, uno de los más amplios y en el que vimos enfrentamientos intensos, reunió bastantes capítulos. La parte final nos presentó una arena en la que todos pasaron a luchar contra el rey de las maldiciones, quien destruía todo lo que tenía por delante.
Jujutsu Kaisen nos dio un final bastante inconsistente y se percibió algo apresurado, y aquí te comento por qué pienso esto.
¡Alerta de spoiler! — Detalles del final de Jujutsu Kaisen
¿En qué terminó Jujutsu Kaisen?
Jujutsu Kaisen es una historia de fantasía oscura en la que una organización de hechiceros lucha contra las maldiciones y espíritus malignos, sin embargo, hay ciertos conflictos políticos y de status social que sostienen el universo mágico, y lo construyen debido a las necesidades.
De hecho, en la segunda temporada vimos cómo la familia de los Zenin es una verdadera calamidad, por otro lado, también logramos ver cómo es que Gojo y Geto tuvieron sus propias intenciones de rebelarse contra el sistema. Así que todo esto se juntó para finalizar la serie de Gege Akutami.
Parte del final de Jujutsu Kaisen:
Gojo Satoru, el héroe más querido de Jujutsu Kaisen, murió a manos del rey de las maldiciones que, posteriormente cayó en la trampa que los hechiceros se habían ingeniado como plan B, en caso de que el hechicero más fuerte de todos, muriera —como sucedió—. Tras esto, Yuta y Yuji —con papeles clave en la batalla— lograron vencer a Sukuna, tras esto, Yuji le ofrece una nueva oportunidad para que siga viviendo como su huésped, sin embargo, Sukuna declina la oferta.
Después de esto, tras sellar el último dedo, todos intentan regresar a la normalidad, así que se delinea cómo será este nuevo sistema.
Gojo está muerto. Sin embargo, Nobara está viva, al igual que Yuta y Megumi, entre otros de los hechiceros que asegurábamos muertos…
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¿Por qué fue tan malo el final de Jujutsu Kaisen?
Aclaremos desde el principio, lo que podríamos considerar como un mal desenlace: un final inconsistente, que no respeto los propios principios de la obra; y es que, Jujutsu Kaisen fue una entrega muy oscura, bastante (des)afortunada, desde la perspectiva de que todo lo que sucedía se volvía un caos lleno de muerte y destrucción, partiendo de un mundo normado de manera grotesca e inmutable.
Los personajes sufrían a causa de sus familias e incluso debido a su ingreso en el ámbito escolar al ser parte de la organización de hechiceros. Y por supuesto, debido a ello, no había forma de escapar del sistema.
De esta forma, Jujutsu Kaisen se erigía como historia antisistema, muy bien definida, y claro, vertebrada por la astucia de la brujería y hechicería. Uno de los últimos arco propuso una batallla interminable, que se extendía como marea de mar, los personajes caían uno a uno, los fanáticos se quedaban sin cartas de fortuna para una final agradable, ya que el tono apuntaba a un fatalismo total: a) a que “Sukuna [el mal] venciera”, b) a que Yuji cediera (como parecía que lo haría Megumi), y se convirtiera en maldición, entre otros desenlaces del mismo estilo.
No obstante, reconozco que existía la duda, la esperanza, de un mejor futuro, lo que le brindó a Jujutsu Kaisen la esencia de shonen clásico Y de hecho, ello fue por lo que se optó, un desenlace en que el trío de amigos sobrevive y se mantiene firme gracias a las enseñanzas de su maestro.
Jujutsu Kaisen se inclinaba a cerrar con un final fatalista (como el de Devil Man Cry Baby), no obstante nos sorprendió regresando a la vida a casi todo el elenco, con excepción del más querido y mayormente solicitado: Gojo Satoru.
La esperanza se mantenía, a final de cuentas, Gege Akutami revivió a Yuta que tuvo prácticamente un trasplante de cerebro y también a Nobara que, parecía, habría perdido media cabeza. Sin embargo, no hubo salvación para Gojo Satoru.
Un análisis rápido nos hace pensar que la mitad de la cabeza destrozada de Kugisaki podría haber sido más complicada de rediseñar que el cuerpo partido a la mitad de Gojo, pero aún con ello, la chica regresó y el maestro no.
Los mangakas, aclaro, no están para darnos el final que deseamos, si no el que la historia misma solicite, y bueno, en realidad, todos aplaudimos el regreso de la hechicera de vudú. No obstante, es apreciable que, la chica regresó de un panorama complejo, mientras que el profesor no, esto vuelve a la narrativa un poco inestable en contrastes de posibilidades.
Por otro lado, si hablamos del ritmo que a Jujutsu Kaisen llevaba, sinceramente, el propio anunció del final fue bastante abrupto y hasta imposible de procesar. Había varios cabos sueltos y poco espacio para desenmarañarlos, todos nos preguntamos cómo resultaría aquello. Todo fue bastante rápido en comparación del desarrollo de los otros nudos narrativos.
Nadie podría decir que Gege Akutami no nos sorprendió, porque vaya que lo hizo en los últimos capítulos. Todos se preguntaron por qué surgía tan de repente el rush de energía para finalizar la historia. Fue inevitable considerar alguna especie de hastío —¿se habrá aburrido de la historia? ¿Por eso querrá terminarla pronto?, nos preguntábamos— y que respondiendo a ello, obtuvimos lo abrupto de los últimos momentos de Jujutsu Kaisen. Desde luego, son cuestiones que no se pueden comprobar, pero fue bastante sorpresivo e inevitable no considerarlo así.
Jujutsu Kaisen es una de las joyas de Shuēsiha, o era, para ser más precisos.
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¿El final de Jujutsu Kaisen fue “malo”?
El desenlace de Jujutsu Kaisen se sintió apresurado, algo ambiguo y también inconsistente. Sin embargo, es probable que, el mensaje de la obra se haya entregado de la manera en que el mangaka quería, como todos los autores de shonen oscuro, de manera siniestra y absurda, además de fugaz y ardiente, entonces, desde mi perspectiva, ello podría considerarse positivo, ¿no?
El final de Jujutsu Kaisen, desde mi perspectiva, no es malo, pero da la impresión de ser un bosquejo, un desenlace no editado, una conclusión apresurada, una terminación laxa e insulsa, cuando menos, en correspondencia al desarrollo de la serialización.
A ti, ¿qué te pareció el desenlace de Jujutsu Kaisen? Te leo en comentarios.
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