Nuestros recuerdos felices no son suficientes para mantenerlo con vida
Si algo tienen los juegos de peleas es que son susceptibles de crear fanatismo por ciertos personajes, ya sea por su kit de habilidades, su actitud o simplemente porque crearon recuerdos traumáticos en los jugadores (te hablo a ti, Rugal).
Hace unos meses se anunció Nickelodeon All-Star Brawl con bombo y platillo, generando un hype muy grande entre quienes vivimos nuestra infancia en la década de los 90.
En este caso, los personajes ya estaban bien posicionados, ya que formaron parte de nuestra niñez; no obstante, ahora podríamos verlos en un juego muy al estilo de Super Smash Bros. que podríamos decir que se quedó corto, dependiendo del punto de vista desde donde lo veas.
Nostalgia pura para los conocedores de Nickelodeon
El primer punto positivo de este juego de peleas es que adaptó de una forma espectacular a los personajes de nuestra infancia, y no solo con su apariencia, sino con escenarios y movimientos que claramente les pertenecen.
Tus combates podrán ocurrir en la convergencia armónica de Avatar, Fondo de Bikini, la azotea de Arnold e incluso en el escenario del oeste que apareció en uno de los capítulos de los Rugrats.
Todos los escenarios están diseñados con cuidado y precisión, así que si fuiste un fan de hueso colorado de Nickelodeon los reconocerás de inmediato.
Como te mencioné anteriormente, los movimientos también van acorde a los personajes, incluso si estos jamás pelearon dentro de sus respectivas caricaturas.
No te preocupes, Bob Esponja no sacará técnicas extrañas inventadas para darle un kit de movimientos. Todos y cada uno de sus ataques tiene fundamento en la serie, y eso hay que reconocerlo.
Peleadores para chicos y no tan chicos
Como seguro habrás visto en los trailers, Nickelodeon All-Star Brawl cuenta con personajes de Rugrats, Avatar, Bob Esponja, CatDog y hasta Danny Phantom, series que podías ver mientras hacías tu tarea después de la escuela, pero también cuenta con visitantes un poco más de culto.
Ren y Stimpy, quienes en su momento horrorizaron a las mamás con su estilo irreverente, también están incluidos, y no con uno, sino con dos personajes que incluyen a la dupla principal al estilo Banjo-Kazooie, y al Hombre Tostadas en Polvo.
Oblina de Aaahh!!! Real Monsters, Lincoln Loud y Lucy Loud de The Loud House, y Helga de Hey Arnold! componen el ‘lado hipster’ del roster, y no por ser desconocidos, sino porque sus series se volvieron más de culto.
El mayor acierto de Nickelodeon All-Star Brawl: Los controles y movimientos similares a Melee
Seguramente en este punto ya habrás notado que los pro players de Super Smash Bros. están amando este título, y no es para menos, ya que les trajo recuerdos de un viejo conocido.
Uno de los que constantemente sube contenido es MKLeo, uno de los mejores jugadores del título de peleas de Nintendo en el mundo.
Nickelodeon All-Star Brawl toma parte de la jugabilidad de Melee e incluso las mecánicas son prácticamente las mismas; no obstante, es en este punto en donde encontramos el primer apartado controversial.
En ciertos momentos notarás que los controles y el set de movimientos pueden crear combinaciones rotas, justo como la versión del juego de peleas de Nintendo lanzada en Game Cube.
Esto no necesariamente es algo malo, ya que los jugadores de la vieja escuela se sentirán como en casa, con todo y los combos interminables.
Los nuevos tampoco tienen mucho de qué preocuparse, ya que el tutorial explica paso a paso cómo usar cada una de tus habilidades. Lo que sí debemos advertirte es que calcular el timing tiene su chiste, así que practica mucho.
Como en todo juego de peleas, podrás dar un golpe ligero, uno fuerte, cubrirte, esquivar, correr, hacer llaves y lanzar poderosas habilidades que dependen de cada luchador.
El peor error de Nickelodeon All-Star Brawl: La falta de voces
Parte de la experiencia que muchos esperábamos era escuchar a los personajes de Nickelodeon decir una que otra frase, pero este título quedó a deber algo tan fundamental.
No solo no incluyeron diálogos sacados de las series, ni siquiera hay pujidos, gemidos, exhalaciones, nada, absolutamente nada.
En lugar de este apartado tan importante incluyeron cajas de texto que aparecen al inicio de cada pelea, y en ocasiones tienen las líneas más genéricas del mundo.
Solo por esta simple ausencia perdió gran parte del hype que tenía, y por desgracia no es la única deficiencia.
Pocas recompensas y modos de juego
Muchos juegos de peleas suelen recompensarte por tu esfuerzo en batalla, así que otorgan como recompensa cosméticos o rangos, pero esto no ocurre en Nickelodeon All-Star Brawl.
Cada que completes un circuito del modo arcade podrás desbloquear arte y canciones salidas de tus series favoritas, pero es todo. No hay personajes ocultos ni cosméticos, así que una vez que pruebes a todos los protagonistas solo te quedará enfrentarte al competitivo para sentir un poco de gloria.
Este apartado en línea funciona bien, pero tampoco te dará grandes cosas a cambio por superar a tus rivales.
Nickelodeon All-Star Brawl tiene tres modos de juego: Batalla de vidas, Batalla por tiempo y Batalla deportiva.
El primero es el clásico de toda la vida en donde tienes que sacar de la plataforma al rival hasta dejarlo sin oportunidades de continuar. Podríamos decir que es la experiencia estándar.
Si quieres alargar un poco más la acción, puedes poner combates por tiempo en donde quien obtenga más victorias se lleva el primer lugar.
Por último, pero no menos importante, tenemos las batallas deportivas, en donde tu objetivo será anotar goles en la portería contraria mientras detienes a tu rival a golpes, justo como en las retas de futbol callejeras.
Existen diversos tipos de balones que deberás identificar para causar efectos en el enemigo, y aunque la idea suena genial, termina siendo un caos.
La mayor parte del tiempo no sabrás en dónde demonios está la pelota, o tú mismo, así que estas partidas acaban en una simple pelea donde circunstancialmente llega a anotarse un tanto.
Una dosis de nostalgia que se diluye rápido
Lamentablemente, Nickelodeon All-Star Brawl se queda muy corto en comparación con otros juegos de pelea, y se consume mucho más rápido.
Ludosity hizo un gran trabajo adaptando la apariencia de los peleadores y los escenarios, pero todo se cae al no tener una voz que los respalde.
Los controles son un gran acierto, y si eres fan del competitivo podrías pasarte un muy buen rato, pero si solo llegaste por el gusto de ver a los personajes de Nickelodeon, te marcharás después de darle un recorrido a todos.
En resumen, la falta de recompensas, los limitados modos de juego y la poca presencia de personajes harán que tus amigos y tu terminen optando por un juego consolidado en lugar de darle oportunidad a esta apuesta.
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*Esta reseña se realizó en un Xbox One.