La experiencia de cuando jugabas con tus pistas cuando eras niño llegó a consolas
Hot Wheels ha acompañado la infancia de millones de niños e incluso forma parte de los estantes de varios coleccionistas alrededor del mundo.
Su historia en los videojuegos no es nada nueva, pero desde 2013 no lo habíamos visto de vuelta en las consolas, hasta ahora.
Hot Wheels Unleashed llega de la mano de Milestone para traer una buena dosis de nostalgia a quienes coleccionamos sus autos y pistas, así que prepárate para volver a esos años en donde sentarte en el suelo y montar sus complejos circuitos era lo mejor del mundo.
De vuelta al patio de juegos en Hot Wheels Unleashed
A través de los años hemos visto diferentes aproximaciones a esta marca, desde los videojuegos que transforman los autos a escala real hasta los que replican la sensación de estar usando juguetes.
Milestone toma esta última visión para trasladarnos a seis diferentes locaciones que van desde habitaciones de una casa hasta un skatepark y una escuela, los cuales sirven como una enorme lienzo que se completa con divertidos circuitos.
El modo principal nos coloca en un mapa dividido por nodos que representan una carrera, al completar ciertos objetivos que regularmente consiste en quedar dentro de los tres primeros lugares, desbloqueamos el siguiente circuito.
Existen diferentes tipos de pruebas: las clásicas contra varios rivales, algunas de contrarreloj, y hasta enfrentamientos contra jefes, aunque estos últimos no son como crees.
Estos desafíos especiales son carreras con pistas cambiantes y obstáculos que dificultan tu progreso, esto significa que no bastará con pisar el acelerador a fondo, tendrás que estar al pendiente para no salirte del circuito, chocar con paredes y hasta ser atrapado por unos curiosos elementos que te mencionaremos a continuación.
El reencuentro con famosas pistas
Como te mencioné al inicio de esta reseña, los desarrolladores nos vuelven a hacer sentir como si estuviéramos corriendo en pistas de plástico, pero estas no son simples circuitos coloridos, también son homenajes a algunos de los juguetes con los que crecimos.
La mayor parte del tiempo encontrarás simples tramos rectos o curvas pronunciadas, pero de vez en cuando te te enfrentarás con los famosos loops que desafían a la gravedad y hasta elementos magnéticos para que corras por el techo o las paredes.
Hasta aquí todo suena genial, y se pone mejor cuando, al avanzar por el modo principal, te encuentras con la famosa pista del ‘Ataque de Araña en el Parque’, lanzada en 2018.
Este elemento se encarga de lanzar telarañas para intentar atraparte y dificultar tu avance, así que deberás ser cuidadoso.
Por supuesto que esta pista especial no es la única con presencia en el juego, también tenemos el ataque de la cobra, el T-Rex Takedown y hasta el temible Mega Robot Destructor.
Los autos son las estrellas del show
Aunque las pistas son geniales, no habría juego de Hot Wheels sin los autos, y en este apartado tenemos que hablar profundamente de ello.
Nada más al empezar te darán algunos vehículos para iniciar tu aventura, y el proceso de abrirlos te hará sentir como si los sacaras de su empaque en la vida real.
Estos se obtienen abriendo cajas que se desbloquean con monedas del juego, mismas que se obtienen al triunfar en las carreras.
Cada caja tiene un costo de 500 créditos y te dan derecho a una lootbox con un auto aleatorio de donde puedes obtener más de 60 modelos, incluyendo algunos pertenecientes a importantes licencias como Volver al Futuro o El Auto Increíble.
La otra opción es adquiriendo tipos específicos en la tienda, aunque estos tienen un precio mayor y cambian constantemente.
Cada modelo tiene sus propias características y aquí es importante ahondar un poco.
Existe un grado de rareza que va desde el común hasta el legendario, y aquí hay un punto en contra, ya que una vez que encuentras uno de los autos más extraños, se puede perder el interés por otros diseños.
Cada coche es mejorable
Existen varias características a considerar para determinar la eficiencia de los autos, entre ellas la velocidad, el frenado, la maniobrabilidad y el turbo.
Es aquí donde entra en juego el balance, el cual está bien implementado, ya que existen autos lentos, pero con más cargas de turbo o mejor control, o vehículos muy rápidos que se manejan fatal o tienen menos impulso.
Esto hace que casi todos los modelos puedan competir en igualdad de condiciones, siempre y cuando el jugador sepa explotar sus fortalezas.
Obtener las monedas en el modo de un solo jugador no es tan sencillo, pero la satisfacción de abrir tu nuevo coche con la esperanza de obtener un modelo raro o de una colección específica te hace sentir de nuevo como un niño.
Es posible que en algún momento te salga un auto repetido, pero no te preocupes, puedes personalizarlo con texturas, diferentes colores y hasta calcomanías para darles un estilo único o desmontarlos para obtener engranes y mejorar tu vehículo favorito.
Estas mejoras involucran la cantidad de cargas de turbo y las cualidades originales como velocidad, frenado o control.
El creador de pistas, un lienzo abierto a tu creatividad en Hot Wheels Unleashed
Cuando te hablo de volver a tu infancia no estoy exagerando, ya que parte de la experiencia de jugar con estos autos era armar tu pista e incluso crear mezclas extrañas.
Hot Wheels Unleashed tiene un editor en donde podrás tomar uno de los seis escenarios para acomodar varios elementos que el juego pone a tu disposición. Estos se desbloquean ganando carreras en el modo de un solo jugador, así que te recomiendo completarlo.
Aquí podrás colocar todo tipo de elementos para crear alocados circuitos con aceleradores de velocidad, cargadores de turbo, loops que desafían la gravedad y hasta famosas pistas.
Hasta el momento de esta reseña es el modo en el que he invertido más tiempo, aunque no todo es miel sobre hojuelas.
A pesar de que puedes distorsionar cada tramo que colocas, se sigue sintiendo un poco repetitivo, pero no por ello debemos menospreciar esta característica, ya que algunos jugadores podrían sorprendernos con alguna obra de arte.
Toda una experiencia sonora
En Hot Wheels Unleashed la experiencia sonora es genial, ya que la banda sonora se ajusta a los movimientos que hace tu auto en la pista.
Si tomas un loop notarás que la canción en turno experimenta una distorsión y una disminución de volumen en la parte central de dicho tramo, y si aceleras en la pista, escucharás como el pitch aumenta y suena más agudo.
Los efectos sonoros de aceleración, turbo, choques y hasta al tomar impulsos están muy bien logrados, así que te sentirás en medio de una carrera real.
PlayStation 5 explota unas cuantas características más de Hot Wheels Unleashed
En el caso de la consola de Sony, el DualSense también emite sonidos a la hora de chocar o usar el turbo, así que tu oído recibe constantes estímulos que contribuyen a la inmersión.
Por su parte, los gatillos presentan resistencia al acelerar o frenar desde un estado de reposo, lo cual hace mucho más realista la experiencia.
Si tienes la posibilidad de usar unos audífonos Pulse 3D incluso notarás como los sonidos llegan de diferentes lugares, así que vale mucho la pena.
En resumen, Hot Wheels Unleashed es un gran juego que fascinará a los amantes de estos autos de juguete. Sus mecánicas y la forma de obtener nuevos coches te harán sentir como cuando los sacabas de su empaque en tu infancia.
El roster de vehículos es balanceado, pero una vez que obtienes modelos legendarios no queda mucha motivación para seguir abriendo cajas.
El modo de creación de pistas es divertido y te permite sacar a flote tu creatividad, pero los elementos siguen sintiéndose limitados.
Si eres amante de los autos Hot Wheels, deberías darle una oportunidad.
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*Esta reseña se realizó en PlayStation 5.