The First Slam Dunk se siente muy cerca, especialmente porque se estrenará en cines de México y Latinoamérica durante julio 2023. Ahora bien, antes de esta película, incluso del anime y el manga, Takehiko Inoue ya había experimentado con un par de historias. Una, llamada Aka ga Suki o “Me gusta el rojo” es donde vemos por primera vez tanto a Hanamichi como a Haruko.
El nacimiento de Aka ga Suki se da en la forma de un “one shot”, es decir, una historia corta de una sola publicación, solo que en este preciso caso se presenta de un modo único, pues solo apareció en una edición especial de verano en 1990 de la revista semanal japonesa Shonen Jump.
Podría decirse que Aka ga Suki es la historia piloto de Slam Dunk, sin embargo, en 1988, Takehiko Inoue lanzó una historia corta de básquetbol llamada Kaede Purple que tiene a Kaede Rukawa como protagonista. Aquí la personalidad de Rukawa es ciertamente especial porque es más abierta y apasionada por el deporte.
Pero ¿cómo es la historia donde conocemos por primera vez a Hanamichi y a Haruko? ¿Es distinta a lo que conocemos hoy? Vamos a contarte de qué se trata.
La relación entre Haruko y Sakuragi más allá de Slam Dunk
Antes de Slam Dunk, Hanamichi Sakuragi también era un delincuente juvenil
Slam Dunk comienza con un lamentable momento, cuando Sakuragi es rechazado por una chica de su secundaria, la número 50, la que terminó andando con Oda, el capitán del equipo de básquetbol. Igual y pensaste que el protagonista era solo un chico enamoradizo, sin embargo, en la realidad era un buscapleitos.
Esta base nace de la historia Aka ga Suki donde Sakuragi es igual de alto, pelirrojo y, por si eso no fuera suficiente, es un delincuente juvenil que “aparentemente” también fuma, pues trae una pipa en la boca. Los amigos de Sakuragi técnicamente repiten, son la calca y tienen el mismo comportamiento de molestar a su “jefe”.
Es curioso como después de tanto tiempo se mantuvo la psicología de tantos personajes y que siguiera tan vigente y entretenida. Claro, hay que agregar que Sakuragi en Aka ga Suki no es ningún atleta, pero sí es un chico bueno, a pesar de tener la pinta de un delincuente juvenil.
Esto es algo que se ve que le gusta seguir a Takehiko Inoue, las historias de los chicos que aún con tantos problemas, cambian y mejoran como personas, porque en el fondo tienen un buen corazón.
Haruko, una chica que nada más no ve
Existe una diferencia grande entre la Haruko de Slam Dunk y la de Aka ga Suki, empezando por su diseño más básico. En esa historia del verano de 1990, esta chica usa lentes y tiene una actitud un poco más “alzada”, aunque también un tanto “distraída”. ¿Por qué decimos esto último? Es fácil, Haruko cuando no trae lentes, técnicamente no ve nada.
El común denominador es que ambas versiones de Haruko no se fijan en Sakuragi, especialmente porque están pensando en alguien más. Otra diferencia en la psicología de ambas es que una está enfocada en los temas de la escuela – sin contar con mucho desarrollo – y la de Slam Dunk pues gusta del básquetbol.
Se nota mucho que Takehiko Inoue ve en Haruko a una chica muy tierna, pero distraía. Hasta cierto punto enamoradiza también de un muchacho ideal para ella.
Aka ga Suki, la bella y la bestia, el delincuente y la chica bonita de Takehiko Inoue
En el número especial de verano de la revista Shonen Jump vemos por primera vez en la portada a Hanamichi Sakuragi, solo que en esta presentación no es ningún basquetbolista, solo es un sujeto que va a la preparatoria y que es un alumno problema, eso sí, cuenta con un enorme corazón y es muy enamoradizo.
La primera vez que Sakuragi ve a Haruko se enamora y dice abiertamente que es como le gustan. La cosa es que no se anima a hablarle y eso es un problema. En el fondo es un tipo muy tímido. El destino de ambos se cruza de manera abrupta pues un chico quiere abusar de ella, la cuestión es que, cuando pierde sus lentes, Haruko nada más no ve nada.
Sakuragi es muy amable con Haruko, la ayuda y piensa que se vuelve su amigo y por eso es casual con ella, pero cuando esta chica usa sus lentes, técnicamente lo desconoce y le dice que ese cabello rojo es muy feo y que por eso no le agrada. Cuando el corazón de Sakuragi es roto, sus amigos se burlan de él.
El problema es que, en su mente, Haruko solo recuerda a un amable chico que usa una gorra roja en vez de a Sakuragi, quien tiene cabello rojo. La relación entre ambos se compone gracias a los amigos de Sakuragi, pero el chico que quería abusar todavía quiere cobrar venganza.
Una historia muy valiosa, en términos de coleccionismo
Conseguir el número de la Shonen Jump que trae Aka ga Suki no es una misión imposible, pero sí una realmente cara. El precio se llega a elevar por arriba de los 5 mil pesos mexicanos, dependiendo del vendedor. Con el paso del tiempo y el regreso de la popularidad de Slam Dunk de seguro veremos un incremento en el precio.
Este es un artículo que tiene más de 30 años de existir y conseguir un número en buen estado debe ser una tarea ciertamente complicada. Tal vez saliendo a Japón y estando al tanto de una subasta de Yahoo o en un Mandarake, pero más allá de eso se nota que es algo muy difícil.
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