Sabemos que el modelo de los juegos como servicio es uno de los que más quieren seguir las compañías y por ello están bastante lejos de desaparecer. Sin embargo la llegada de Suicide Squad: Kill the Justice League nos enseñó una vez más que no es tan bueno confiar en este tipo de títulos. Por algo el público cada vez es más cauteloso con ellos.
Ya nos rompieron el corazón varias veces con sus prácticas, pero creemos que hay una manera en la que pueden dejar de hacerlo. La cual al final de cuentas sería benéfico tanto para las desarrolladoras como para nosotros los consumidores.
El precio de los juegos como servicio es un factor que nos aleja
Uno de los factores que más alejan a los consumidores de los juegos como servicio es el precio. Algunos de los peores cometieron la osadía de venderse a precio completo. Esto es problemático principalmente porque, si ya es una experiencia que sigue este modelo, eso automáticamente significa que es un juego incompleto de cierta manera.
Es un hecho que va a recibir más contenido en el futuro, pero tendrás que volver a pagar para disfrutar de lo nuevo que ofrezca. Algunos ofrecen la primera temporada o la primera oleada de contenido gratis en tu compra, pero no nos parece que sea un gran incentivo para desembolsar tanto dinero.
A esto agreguemos que el mercado cada vez está más saturado de juegos así. Debido a ciertos casos de éxito todos quieren su parte del pastel, pero no todos logran ser tan cautivantes. Sin mencionar que algunos estudios hacen lo mínimo y creen que poner un nombre famoso de franquicia bastará para que la gente venga corriendo a comprarlos.
Hay varios desastrosos ejemplos de años recientes que nos muestran que los juegos como servicio no son una inversión segura para nuestra diversión.
Siempre son una apuesta
Los juegos como servicio suelen pensarse como experiencia en línea y multijugador. Esto a la vez es una de las razones por las que los consumidores se alejan de ellos. Después de todo son experiencias que dependen de que muchos jugadores lo disfruten por mucho tiempo. ¿Pero qué pasa cuando sólo logran atraer a un muy pequeño sector del mercado?
Los gustos de las personas son muy variados y también pueden cambiar. Por eso nada asegura que los juegos como servicio que se lanzan se conviertan en éxitos que nos darán horas de diversión. Algunos simplemente llegan para fracasar, lo que hace que cada vez tengan menos jugadores, contenido y al final ya no se puedan disfrutar.
Todo porque no tienen un componente de un solo jugador o porque requieren de una constante conexión a internet que evidentemente desaparece cuando tiran sus servidores.
Claro que como consumidores no podemos controlar qué tan bien o mal le irán a los juegos como servicio. Por eso decimos que de cierta manera son una apuesta, sobre todo cuando son de pago. Pues nada asegura que en unos años o incluso meses, tu dinero no se irá a la basura.
Los juegos como servicio deben ganarse el dinero que les damos
La manera en la que los juegos como servicio pueden combatir esta incertidumbre es lanzarse como free to play desde un inicio. Así pueden crear más fácil una base de jugadores interesados. Ya que no ganan nada de vender el juego, entonces deben trabajar en crear un ciclo de jugabilidad bastante bueno y entretenido que mantenga a los usuarios volviendo por más y más.
Ya lo vimos con Fortnite. Es enteramente gratis, mientras las microtransacciones vienen con skins para los personajes, mochilas, picos, bailes y otras cosas. Los jugadores están tan encantados que no les molesta gastar un poco más para añadirle más personalidad a sus horas de diversión.
Además lo que vendan debe ser enteramente estético porque si comienzan a ofrecer ciertas ventajas entonces caerán en el pay to win y perderán la confianza de los usuarios.
Finalmente este acercamiento del free to play no da esta sensación de poner en riesgo tu dinero. Después de todo quienes gastan lo harán por su propia decisión y seguramente después de quedarse maravillados con lo que el título tiene por ofrecer. Si las desarrolladoras hacen las cosas bien, es entonces cuando los jugadores desearán recompensarlos y apoyarlos para que continúen dándole contenido a estos títulos
Si siguen por este camino se encontrarán la misma resistencia por parte de los jugadores
Finalmente las compañías desarrolladoras son las que tienen millones de dólares detrás de ellos. ¿No deberían ser ellas las únicas responsables de pagar los platos rotos y no los jugadores? Después de todo ellos decidieron probar con los juegos como servicio.
Para que estos tengan más oportunidades de triunfar lo mejor sería este acercamiento del free to play o por lo menos precios más bajos. Después de todo el resto, teóricamente, deberían recuperarlo con el contenido que vendan después.
Si deciden venderlos a precio completo, entonces deben ofrecer algo que disfrutar aún sin servidores y sin otros jugadores. De otra manera es un riesgo muy grande para el consumidor.
Quizás otra salida podría ser algo como lo que hicieron juegos como Bioshock 2, Dead Space 2 y Ghost of Tsushima. Que el aspecto de juego como servicio sea un apartado extra además de la campaña de un solo jugador. Un modo multijugador atrapante donde ofrecen otras experiencias.
Si no hacen las cosas así, entonces el destino de los juegos como servicio será continuar con más fracasos que éxitos, mientras que los jugadores que sigan creyendo en ellos seguirán con el corazón roto una y otra vez. ¿Cuántas decepciones más podrán aguantar?