Luego de la revelación de Assassin’s Creed Shadows, Ubisoft se encontró con una reacción bastante negativa por parte de los fans. Todo por la inclusión de Yasuke, un samurái de origen africano, como uno de sus protagonistas. Quizás para calmar las aguas, acaban de anunciar que varios de sus juegos clásicos de la saga están a punto de recibir un remake. Aunque no especificó cuáles.
Aunque esto puede significar algo bueno para muchos que siguen la franquicia desde el principio, nosotros creemos que es parte de un problema que ya viene arrastrando Ubisoft desde hace tiempo: No saben qué hacer con Assassin’s Creed ni lo que es.
Las razones por las que Assassin’s Creed tiene un problema de identidad
Las cosas han cambiado con Assassin’s Creed
En sus inicios, Assassin’s Creed nos ofreció varias cosas que la hicieron posicionarse como una saga de renombre en la industria. Entre estas tenemos su parkour, sus aventuras que nos llevaban a conocer a personajes reales en importantes eventos históricos y una jugabilidad más centrada en el sigilo y el uso de diferentes herramientas para pasar desapercibido.
Con el tiempo fueron perfeccionando la fórmula e incluso nos dieron un gran simulador de batallas navales en Assassin’s Creed IV. Sin embargo también les ganó un poco la avaricia y sacaban juegos cada año, lo que finalmente llevó al hartazgo de los jugadores.
Fue justo por esto que comenzaron a experimentar con la llegada de Origins. Este nos dio una experiencia más similar a un RPG que además sucede en un enorme mundo abierto con gran variedad de misiones que cumplir. Si bien en su momento este cambio fue bienvenido, otra vez los jugadores comenzaron a hartarse de este acercamiento con la llegada de sus secuelas Odyssey y Valhalla.
Aunque en sí son juegos bastante buenos, son criticados por ser bastante largos. Además de que muchos sienten que dejaron atrás lo que hizo tan querida a esta franquicia. Fue gracias a esto que creemos que Ubisoft causó una crisis de identidad con Assassin’s Creed.
La llegada de Mirage sólo dejó más en claro lo evidente
Esta crisis fue muy evidente con la llegada de Assassin’s Creed Mirage. Un juego que Ubisoft nos prometió volvería a la jugabilidad más clásica de su serie de asesinos. En lugar de concentrarse en enormes mundos abiertos, nos dieron una experiencia un poco más controlada donde además el sigilo volvió a cobrar un papel muy importante al eliminar a nuestros objetivos.
Sin embargo, el resultado no fue lo que esperaban los fans. Parece que después de tantos años sin hacer uno de estilo clásico, Ubisoft olvidó cómo desarrollarlos. El combate se sentía muy básico y al final usar herramientas no era tan necesario para mantenernos ocultos.
Aún así es evidente que no se rendirán con este acercamiento. Precisamente porque acaban de anunciar los remakes de algunos de sus primeros juegos. Todo para intentar ganarse de nuevo a los fans más viejos de la saga. Si bien aplaudimos este intento por regresar a lo que caracterizó a la serie en sus inicios, no deja de ser una prueba de que hay una crisis de identidad.
Además, no sólo lo intentarán con los remakes, también un poco con Assassin’s Creed Shadows. De hecho una de sus protagonistas, Naoe, tiene una jugabilidad muy similar a la de Ezio o Altair. Sólo el tiempo dirá si logra triunfar donde Mirage falló.
Assassin’s Creed Shadows nos da más evidencia de esta crisis de identidad
Regresando a Assassin’s Creed Shadows, su primer avance de jugabilidad confirmó nuestras sospechas. Ambos protagonistas se controlan de manera diferente y parecen apelar a los fans de las dos eras por las que ha pasado la saga desde su nacimiento.
Por un lado, ya hablamos de Naoe. Ella es más similar a los asesinos clásicos al depender mucho más del sigilo y diferentes objetos para salir victoriosa, como bombas de humo y un gancho. Del otro lado tenemos a Yasuke cuyo combate parece una evolución de lo que vimos en Origins, Odyssey y Valhalla. Un enfoque más hacia la brutalidad y los ataques cuerpo a cuerpo con una gran variedad de poderosas armas. El sigilo se fue de sabático cariño.
De acuerdo con Ubisoft los jugadores pueden elegir con quién jugar en cualquier momento y hasta pueden pasar todo el juego con sólo un personaje. Así se aseguran de apelar tanto a los fans más modernos como a los que están desde las cruzadas.
Suena muy bien e incluso ambicioso. Ya veremos en su momento si la jugada les sale bien o nos encontramos con otra situación similar a la de Resident Evil 6. Recordemos que Capcom quiso juntar elementos del survival horror con la acción desenfrenada, pero no supieron combinarlos de una manera satisfactoria.
Cuando llegue Shadows, Ubisoft deberá enfrentarse a una decisión
Aún estamos un poco lejanos a Assassin’s Creed Shadows, pero desde ahora vemos que Ubisoft podría enfrentarse a otra cuestión una vez que llegue a manos de los jugadores: ¿Qué camino seguirán en el futuro? Suponiendo que tenga éxito esta entrega ¿Tomarán este modelo como la base para la siguiente era de la franquicia? ¿Deberíamos esperar más títulos que combinen ambos elementos en un solo juego?
También está la posibilidad de que sea un fracaso. Sobre todo con las amenazas de ciertos jugadores intolerantes que ya anunciaron que boicotearán el juego. Si esto pasa ¿Qué mensaje recibirá Ubisoft? ¿Cuál aspecto dejarán de lado, el parecido a Origins y sus secuelas o el sigilo de las primeras entregas?
Como dijimos. Justo ahora están en un punto donde quieren apelar a ambas audiencias pero inevitablemente llegará el momento en el que tengan que decidir. Por ahora Assassin’s Creed aún tiene sus fans así que Ubisoft debe ser muy cuidadoso con sus siguientes movimientos. De otra manera puede que una de sus sagas más queridas y conocidas se vuelva cada vez más relegada. Para ustedes ¿Cuál creen que es el mejor camino a seguir?
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