Desde que Warner Bros. se unió con Discovery, su nuevo CEO, David Zaslav comenzó a hacer ciertos movimientos. Desde el planeado reinicio de DC de la mano de James Gunn hasta anunciar un reboot de la franquicia de Harry Potter. Todo con el fin de generar más ganancias.
La noticia del reinicio de las aventuras del joven mago fue recibida con algo de negatividad. Después de todo hubo una generación entera que creció viendo estas historias por lo que forman parte de su infancia. Sin embargo, creemos que un reboot de la saga no es tan malo como parece.
¿Por qué el reboot de Harry Potter podría funcionar?
Aunque nos duela, Harry Potter ya tiene sus años
Los millennials que crecieron con las películas de Harry Potter sienten algo de pavor por el paso del tiempo. Lamentamos decirles que la primer película del niño que vivió ya tiene 22 años de haberse estrenado. Mientras que ya pasaron 12 desde que la saga concluyó con Las Reliquias de la Muerte Parte II.
En todos esos años muchos más pequeños llegaron al mundo y eso abre la posibilidad de llevar esta historia a nuevas generaciones. Aunque las películas siguen existiendo y pueden encontrarse fácilmente, no se compara con la emoción de tener algo nuevo. Incluso los viejas fans podrían sorprenderse por algunos cambios.
Un reboot usualmente busca mejorar las cosas. Tomar lo que funcionó en primer lugar y acomodarlo para que sea llamativo para el público actual. En el caso de Harry Potter podría funcionar para explorar mejor el mundo mágico. Después de todo, Warner ya dijo que esa es su intención.
Claro que cabe el riesgo de que tomen decisiones que no sean del agrado del público, pero es algo que siempre hay con estos trabajos. Aún así no deberíamos quitarle la oportunidad a nuevos posibles fans de disfrutar las grandes historias del joven mago, sobre todo si serán hechas específicamente con ellos en mente. Nosotros ya las gozamos, es hora de abrirle el paso a alguien más.
El formato del reboot parece ideal
Lo más interesante del reboot de Harry Potter es que no se tratará de otras ocho películas, sino de una serie de TV que cubrirá todos los libros. Hasta ahora no han dicho cómo se dividirán las temporadas, pero lo más seguro es que cada temporada abarcará un libro
Esto ya le da una ventaja por encima del cine, ya que idealmente una película debe durar menos de tres horas para maximizar sus ganancias. Esto hace que, en el caso de adaptaciones, mucho material del libro se quede sólo en las páginas. Los directores y guionistas deben condensar demasiado para meter sólo lo más importante.
En las series no tenemos este problema, pues usualmente las temporadas son de entre 8 y 13 episodios que pueden durar hasta una hora. Con todo este tiempo extra, los libros de Harry Potter podrían ser mucho mejor adaptados. Lo cual a su vez exploraría más algunos eventos y relaciones entre personajes.
Por ejemplo, en La Cámara de los Secretos nunca queda muy claro el por qué Dobby quiere ayudar al protagonista, cuando esto se explica muy bien en el libro. También la historia del padre de Harry y su grupo de Merodeadores podría explicarse tan bien como en el impreso.
Los fans de los libros de Harry Potter saben que hay muchas subtramas que no llegaron a verse en el cine. El reboot en formato de serie es una gran oportunidad para dejar a la obra completa brillar. Incluso quienes crecieron sólo viendo las películas podrían sorprenderse con todo lo que se perdieron.
Un reinicio de Harry Potter podría demostrarnos la visión de nuevos directores
A lo largo de las ocho películas de Harry Potter se le dio oportunidad a diferentes directores de impregnarle su visión a la franquicia. Un reboot en formato de serie podría hacer esto incrementado exponencialmente. Como fue el caso de The Mandalorian que en cada episodio dejó a un director diferente hacerse cargo.
Aunque le des la misma historia a dos artistas no harán la misma cosa, inevitablemente habrá diferencias. Así que el reboot podría ser una oportunidad para ver qué novedades nos pueden presentar con el material que ya conocemos y tanto queremos.
Tampoco podemos olvidar que la saga de Harry Potter se presta mucho para este cambio de visiones. Después de todo inicia como una suerte de aventura de fantasía infantil y progresivamente se convierte en una épica oscura con temas de muerte, soledad e incertidumbre.
Existe la posibilidad de que incluso con el reboot llegue alguien que entienda mejor lo que los libros querían expresar y lo adapte con más fidelidad. Pues incluso los fans de las películas y los libros están de acuerdo en que hubo partes que pudieron manejarse mejor. Como la gran revelación de El Cáliz de Fuego o la muerte de Voldemort.
Aunque hay cosas que pueden salir mal con el reboot de Harry Potter, también tiene mucho campo para mejorar. Su mejor fortaleza es su formato, el cual bien aprovechado podría darnos una adaptación incluso mejor que las películas. Sin mencionar que en caso de que todo salga mal, siempre podremos volver a los filmes que cautivaron a toda una generación.
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