Desde sus primeras proyecciones, De Noche con el Diablo se perfiló como una de las películas de terror más aterradoras de los últimos años. Incluso Stephen King, creador de varios de los clásicos de literatura de horror compartió en redes su entusiasmo por ella. Esto hizo que las distribuidoras decidieran darle una oportunidad en el mayor número de pantallas posibles.
Ahora por fin estará disponible para el público mexicano a partir de este 1 de agosto. Tuve oportunidad de verla antes de su estreno y por eso te comparto aquí mis impresiones. Aunque te adelanto que me pareció una de las películas de terror más imperdibles de la actualidad. Ya sabrás por qué.
Los puntos importantes de nuestra reseña de De Noche con el Diablo
¿De qué trata De Noche con el Diablo?
De Noche con el Diablo nos muestra el último programa de un talk show nocturno llamado Night Owls, conducido por Jack Delroy. Por un momento este era el show más visto de la televisión y su estrella ascendió rápidamente en el mundo del espectáculo. Sin embargo decidió alejarse de los reflectores tras una tragedia personal.
Un tiempo después regresa al programa pero evidentemente ya no es tan popular como antes. En un intento por incrementar sus ratings, decide invitar a una niña supuestamente poseída al programa en la noche de Halloween de 1977. Lo que sigue es uno de los eventos más tenebrosos de la televisión estadounidense.
La presentación de la película es uno de sus puntos más fuertes y creativos
El preámbulo de De Noche con el Diablo ya nos indica que lo que veremos es supuestamente el máster de lo que se transmitió esa noche. Esto incluye justo lo que pasó en televisión abierta, así como varias tomas del detrás de cámaras que nos dan a conocer más de la historia.
Como tal, toda la película se presenta literalmente como un programa nocturno de los años setenta. Incluso cuenta con un formato cuadrado en todo momento, con la ausencia de color marcando las pausas comerciales. Además, la pantalla está llena de ‘ruido’ que es como se veían las televisiones de aquella época y el diseño sonoro también está hecho para sonar como proveniente de una TV vieja.
También inicia con un falso documental para adentrarnos en la historia que hace sentir a De Noche con el Diablo mucho más auténtica. Esto, combinado con la decisión de utilizar actores muy poco conocidos, ayuda a vender más la fantasía de que esto sucedió realmente alguna vez.
Claro que la presentación de ‘metraje encontrado’ ya es mucho más vieja que De Noche con el Diablo. Aún así me parece que sus directores hicieron un gran trabajo aquí al darle justo ese tratamiento de show de noche. Quienes crecieron en la época o con programas similares sabrán que se volaron la barda a la hora de recrearlos.
De Noche con el Diablo captura de manera brillante los años setenta
Otra parte en la que brilla bastante De Noche con el Diablo es en su representación de la década de los setenta. No sólo en los sets de grabación de Night Owls, también en el vestuario y el comportamiento tanto de los invitados como de los espectadores del show.
Aquí quiero hacer un paréntesis especial para David Dastmalchian, quien da vida a Jack Delroy. A lo largo de toda la película se convierte totalmente en un presentador carismático salido de aquella época, pero también da apertura a momentos muy dramáticos y algo de locura que mejora la experiencia.
Considero que el sentimiento setentero en De Noche con el Diablo además que se extiende más allá de los sets. También su manejo del terror es bastante similar a algunas películas del género que salieron durante esos años. Un horror mucho más sútil pero que se queda contigo aún después de los créditos.
No esperes mucho gore y jumpscares
Para profundizar más en este sentimiento, quiero recordar el terror de películas como El Bebé de Rosemary, El Resplandor o El Exorcista. Ahí no hay una enorme cantidad de jumpscares ni gore como en cintas más modernas. Más bien se van por un terror psicológico que se adentra en lo más profundo de tu mente.
De Noche con el Diablo es igual. Su enfoque está más en crear una atmósfera terrorífica y en invadir al espectador con un constante cuestionamiento de ¿Qué pasará después?. Por supuesto esto no significa que huya a imágenes más impactantes al frente y centro. Sí hay algo de eso, pero son más las imágenes escondidas pero perturbadoras que podrían acompañarte fuera de la sala del cine si prestas atención.
Esto trabaja a favor de la película. Desde sus primeros momentos ya te plantea lo que va a suceder y te tiene a la expectativa. Sabemos que fue una noche que terminó mal para todos, pero no por eso deja de ser atrapante el ver cómo se desenvuelven los macabros eventos.
De Noche con el Diablo incluso va más allá al jugar con la mente del propio espectador en una escena muy buena. Obviamente no entraré en detalles de la misma para no spoilearlos, pero indudablemente sabrán a que me refería cuando la vean. Justo ahora no recuerdo otra película que transmita una sensación similar.
De Noche con el Diablo aprovecha bien su bajo presupuesto aunque también es notorio
De Noche con el Diablo es una cinta de bajo presupuesto. Aún así se nota que los directores sacaron el máximo provecho de esto y la mayoría de las veces funciona a su favor. La sensación de claustrofobia por el formato y el hecho de que todo suceda en un mismo lugar te indica que no habrá forma de escapar cuando todo se vaya al infierno.
Sin embargo, este presupuesto también funciona en su contra en puntos clave. Hay algunas escenas con efectos visuales muy notorios, pero de una mala manera. Es imposible preocuparte porque alguien resulte electrocutado cuando los rayos se ven tan caricaturescos.
Quizás sabiendo esto fue que decidieron dejar estos efectos en escenas muy cortas, pero aún así es bastante notorio y llega a sacarte de la gran premisa que estableció De Noche con el Diablo. Para mí es su punto más negativo en una cinta que generalmente logra con creces lo que se propone.
¿Deberías verla?
De Noche con el Diablo me parece una propuesta muy interesante que demuestra que hay diferentes maneras muy efectivas para causar terror. Nos da un muy creativo uso del formato de metraje encontrado combinado con una trama que te atrae con risa para luego darte sustos duraderos.
Aún si no eres fan de las películas de terror, pero sí un amante del cine, recomiendo que la veas por lo menos una vez. Creo que tiene potencial para convertirse en un futuro clásico que será revisitado en el futuro. Aunque como dije, sus efectos visuales la alejan de entrar totalmente a la grandeza.
Así que si buscas algo que valga tu dinero en el cine, definitivamente deberías darle una oportunidad a De Noche con el Diablo. Pues además de entretenerte, estarás apoyando una idea completamente refrescante y original que tanta falta nos hace en estos tiempos.
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