TierraGamer - Noticias de Videojuegos, Anime y Cultura Geek

Keeper es una experiencia diferente en tiempos de secuelas

vistas

  1. Inicio
  2. >>
  3. Reseñas
  4. >>
  5. Keeper es una experiencia diferente en tiempos de secuelas
Compartir:
Keeper
Overall
85%
85%
  • Mecánicas de juego - 85%
    85%
  • Historia - 85%
    85%
  • Música - 85%
    85%
  • Gráficos - 85%
    85%

Summary

En esencia, Keeper apuesta más por la experiencia que por las mecánicas, y en eso triunfa completamente. Quizá le pida paciencia al jugador moderno, pero quien se la dé entenderá por qué debía ser así. Encontrará un refugio: un juego relajante, hermoso, íntimo y especial.

  • Genero: Aventura
  • Plataforma: PC, Xbox Series X|S
  • Estreno: 17/10/2025
  • Publicador: Xbox Game Studios
  • Desarrollador: Double Fine

Keeper es la nueva producción de Double Fine, y honestamente, me ha costado trabajo definirlo. Sí, tiene elementos de plataformas y exploración, pero no encaja del todo en un género específico. Y eso, lejos de ser un problema, es parte de su encanto.

Este no es solo un título que se juega, es un juego que se vive. Visualmente es espectacular, con un estilo que destaca en medio de un panorama saturado de secuelas y remakes. Ver algo tan único, con tanta personalidad, que decide crear su propio camino en lugar de seguir tendencias, es un verdadero respiro.

Keeper tiene un inicio muy particular

Al inicio, la jugabilidad puede parecer torpe y lenta, y entiendo que eso pueda alejar a más de uno. Pero hay un motivo detrás. Todo tiene una intención narrativa. El juego comienza cuando un faro cobra vida tras rescatar a un ave perseguida por criaturas de oscuridad.

Este faro —recién “nacido”, por decirlo así— debe aprender a moverse, a interactuar con el mundo, entender su propio propósito. Por eso sus primeros pasos son torpes, lo cual, de alguna manera, forma parte del viaje.

Keeper, Faro
Double Fine

Una experiencia intuitiva que te atrapa por completo

Para los estándares modernos, donde todo debe ser rápido, preciso y explosivo, Keeper puede parecer extraño. Pero una vez que tomas el control y comienzas a explorar, avanzar, desbloquear habilidades y nuevas formas de interactuar con el entorno, el juego te atrapa por completo.

Cada paso abre el mundo un poco más. Empiezas a resolver acertijos, a dominar las plataformas, y de repente, sin darte cuenta, estás completamente inmerso. Los escenarios, los mapas, los detalles visuales… todo invita a perderse dentro de ellos. La música, además, acompaña perfectamente; es una presencia constante, suave, pero poderosa.

Keeper, pájaro, faro
Double Fine

Keeper es una experiencia que requiere atención

No esperes grandes cinemáticas ni largos diálogos. Keeper te pide algo distinto: atención. Todo lo que necesitas saber está frente a ti, en los gestos, las luces, las sombras, los sonidos. Las respuestas no siempre serán claras, y muchas veces dependerá de cuánto observes y de cuánto te dejes llevar.

En algún punto, la jugabilidad cambia un poco —sin spoilers—, ofreciendo una nueva perspectiva. Esa variación mantiene la experiencia fresca y emocionalmente significativa.

Sí, Keeper puede sentirse lento. Pero, cuando estás realmente al mando del faro o del ave, explorando, buscando, resolviendo, el ritmo deja de importar. Es un juego que te envuelve.

Keeper, Pájaro
Double Fine

¿Deberías jugar Keeper?

Keeper quizá llega en un 2025 lleno de lanzamientos grandes, secuelas esperadas y remakes seguros. Pero ahí, en medio de todo eso, brilla como una bocanada de aire fresco.

Es un juego de confort. Uno que puedes disfrutar sin la presión de competir en línea, sin reaccionar a la velocidad de la luz, sin preocuparte por parries, combos imposibles o jefes eternos.

Todos esos juegos tienen su valor, pero Keeper ofrece algo diferente: un respiro. Un espacio para relajarte, disfrutar y reconectar con lo que te gusta de los videojuegos.

Keeper, reseña
Double Fine

Su dirección de arte es preciosa. No busca el hiperrealismo, sino una identidad visual propia, llena de matices y personalidad. Cada ángulo, cada plano fijo, está cuidadosamente diseñado.

En esencia, Keeper apuesta más por la experiencia que por las mecánicas, y en eso triunfa completamente. Quizá le pida paciencia al jugador moderno, pero quien se la dé entenderá por qué debía ser así. Encontrará un refugio: un juego relajante, hermoso, íntimo y especial.

¿Estás de acuerdo con la calificación? No te pierdas de esta y otras reseñas suscribiéndote a nuestro feed de Google News.

Jugamos Keeper en Xbox Series X|S con un código proporcionado por un representante de Xbox en nuestra región.