Un juego que casi pasa desapercibido
Este 2021 ha estado lleno de grandes lanzamientos en el mundo de los videojuegos. Con tantos gigantes como Forza Horizon 5 o Back 4 Blood, no es raro que algunos otros pasaran por debajo de nuestro radar. Como fue mi caso con Voice of Cards.
Voice of Cards: The Isle Dragon Roars es un nuevo RPG de Square Enix que cuenta con la dirección de Yoko Taro, conocido por su trabajo en Nier y Nier: Automata. Esta vez nos da una aventura con la estética de un juego de mesa, al estilo de Calabozos y Dragones, en un mundo donde todo son cartas. ¿Quieres saber qué nos pareció?
La historia de Voice of Cards
La trama de Voice of Cards: The Isle Dragon Roars nos pone en control de un grupo de aventureros en busca de fama y fortuna. Para conseguirla se embarcan en una misión para acabar con la vida de un dragón que ha estado aterrorizando al reino. Quien logre matar primero a este poderoso ser recibirá una gran recompensa por parte de la reina.
Como es costumbre de los RPG en el camino te irás encontrando con otros personajes que te ayudarán en tu misión. Aunque la premisa parece simple, en el camino se va complicando y verás que no todo suele ser como parece. Incluso tiene momentos bastante oscuros y otros que te dejarán sorprendido.
La historia de Voice of Cards es uno de sus puntos más fuertes, ya que logra mantenerte enganchado a lo largo de toda su duración con bastantes giros argumentales. Además, gran parte de esto se debe a sus entrañables personajes. Cada uno con su propio trasfondo y personalidad que harán que te cueste trabajo elegir a quién quieres para que siempre esté a tu lado.
Me parece que Voice of Cards logra capturar todo lo que hace excelente a una historia de fantasía para darnos una que es enteramente disfrutable de principio a fin. Aunque al inicio parece que se mueve un poco lento, no pasa mucho tiempo antes de que estés totalmente interesado en este mundo y sus personajes.
Un RPG que nos regresa a los viejos tiempos
Si bien la historia de Voice of Cards es lo que más me gustó, su jugabilidad no se queda nada atrás. Aquí jugarás un RPG hecho y derecho que seguro disfrutarás mucho si eres fan de los Final Fantasy de antaño. Tiene el típico combate por turnos aunque con algunas pequeñas diferencias.
Tu grupo puede tener a tres combatientes, cada uno tiene sus propias habilidades. Algunos ataques podrás realizarlos sin costo alguno, pero para la mayoría deberás usar gemas. Varios te indicarán el número de gemas que deberás gastar para utilizarlos. Mientras mayor sea el número, más daño o mejores efectos tendrá.
La forma en la que consigues gemas en Voice of Cards es bastante sencilla. Cada que uno de tus personajes realiza una acción, ganarás una de ellas. Además algunos tienen habilidades para generar más o también podrás utilizar objetos que te las dan a cambio. Puede que a veces no tengas las suficientes para los ataques más fuertes, pero nunca tendrás las manos vacías.
Además, me parece que Voice of Cards toma un poco prestado de Pokémon, pues tanto tus combatientes como los enemigos tendrán debilidades ante ciertos elementos. Esto también me parece que favorece la experimentación a la hora de combatir, ya que deberás variar tus ataques para saber cuáles son los mejores para cada contrincante.
Conforme subes de nivel, adquieres nuevas habilidades que pueden sustituir las que ya tienes. Lo bueno es que a diferencia de Pokémon, en Voice of Cards no debes olvidar aquellas con las que iniciaste, por lo que puedes hacer combinaciones que se acomoden mejor a tu estilo de juego.
Voice of Cards y su bella presentación
Al inicio mencioné que Voice of Cards cuenta con la estética de un juego de mesa y aunque suene algo extraño, me parece que crearon un mundo muy bien logrado. Toda esta historia sucede en un reino hecho enteramente de cartas: desde los escenarios hasta los protagonistas y las tiendas.
De hecho, al explorar mueves una clase de peón y conforme pasas, las cartas se van volteando para revelar nuevos caminos o paredes que te detendrán. En ocasiones te encontrarás cartas de cofres de tesoro o con eventos al azar y por supuesto con enemigos.
La historia también es contada por medio de estas cartas y la voz de un narrador. Éste presta su voz a absolutamente todos los personajes. Aunque al inicio pensé en que me habría gustado que cada personaje tuviera su propio actor, me pareció que a quien eligieron para contar toda la historia hace un gran trabajo. Sus inflexiones al hablar y su excelente actuación hicieron que olvidara mi queja inicial.
Además, Voice of Cards se toma muy en serio su papel de juego de mesa. En varias ocasiones el narrador funciona como el ‘maestro del calabozo’ al decir cosas como ‘Se aparece un monstruo frente a ti, ¿qué harás?’. Incluso tendrás que tirar dados que decidirán qué pasará en tu aventura y en los combates.
Una muy grata sorpresa
A pesar de ser un juego que casi dejo pasar, Voice of Cards se convirtió en una muy grata sorpresa y en uno de mis juegos favoritos de 2021. Todos sus elementos resultan en una combinación bastante buena, que incluso recomendaría a quienes no son fans del RPG.
Su combate es fácil de entender, su historia es bastante entrañable y su dificultad está muy bien balanceada, por lo que cualquiera podría tomarlo y jugar. Además, me parece que tiene una excelente relación calidad-precio, ya que es relativamente barato y te otorgará horas de diversión. Me tomó unas 12 horas terminar su historia.
Voice of Cards: The Isle Dragon Roars me parece un título que no deberías dejar pasar, sobre todo si eres fanático de las historias de fantasía. Jugarlo de verdad es un deleite que sólo se incrementa por su bello arte y su música que te hace viajar hasta el medievo.
Jugué Voice of Cards: The Isle Dragon Roars en PS4