¿Y para cuándo regularán los periódicos con fotos de asesinatos y encabezados de burla?
En México se ha propuesto en diversas ocasiones el establecer una clasificación nueva para los videojuegos, misma que no seguiría necesariamente la establecida por otros países.
Hasta el momento estas iniciativas habían quedado congeladas; sin embargo, algunos políticos retomaron esta idea después del tiroteo ocurrido en Torreón, a pesar de que no había una conexión directa con productos gamer.
Todo parece indicar que la propuesta para esta clasificación ya esta tomando forma, y el director de la Dirección General de Radio, Televisión y Cinematografía habló al respecto.
En entrevista con bitMe, Rodolfo González Valderrama hablo de la necesidad de que en México exista una clasificación de videojuegos propia, la cual tendría como objetivo darle más información a los padres sobre estos productos.
Esta nueva categorización llevaría por nombre ‘Guía de Prevención Parental’, y tomaría los mismos parámetros que se consideran para el cine, es decir, el lenguaje, la violencia mostrada, el uso de drogas y la sexualidad.
De la misma forma, la clasificación conservaría las jerarquías de estos productos:
AA: Productos aptos para público infantil
A: Apta para todo público.
B-12: Apropiada para adolescentes y adultos.
B-15: Apta para mayores de 15 años.
C: Apta para mayores de 18 años
D: Solo para adultos.
La institución encargada de otorgar estas nuevas clasificaciones sería la RTC; sin embargo, contaría con el apoyo de instituciones como la CONAMER, la SEP, el Sistema Integral de Protección a Niñas, Niños y Adolescentes, y las aduanas.
Aparentemente, esta propuesta entraría en vigor en un periodo de tres meses, si resulta aprobada.
Los posibles riesgos de una nueva clasificación de videojuegos
Rodolfo González aseguró que este trámite no implicará costos para los consumidores ni para las empresas; sin embargo, no habló de otras posibles consecuencias.
La primera de ellas es que podrían retrasarse los lanzamientos, sobre todo porque analizar un videojuego no toma el mismo tiempo que hacerlo con una película.
Desconocemos cuál sería el proceso mediante el cual las instituciones corroborarían que la clasificación de origen corresponde a la nueva norma mexicana, pero si se pretende revisar a fondo el producto, podría tardar.
El segundo riesgo implica que la RTC podría bloquear la distribución de títulos que considere nocivos para el público, aunque esta posibilidad es remota.
Una persecución a los videojuegos
Aunque hay estudios que lo desmienten, varias instituciones han encontrado una salida fácil al culpar a los videojuegos de los episodios violentos, sobre todo entre jóvenes.
Lo grave del asunto es que se omiten otros factores que realmente orillan a los autores a realizar estos actos.
El tiroteo ocurrido en Torreón es un ejemplo de ello, ya que la primera reacción fue culpar a los videojuegos basándose en una suposición, cuando probablemente el responsable se vio influenciado por su entorno familiar y la masacre de Columbine.
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Lo que nos preguntamos es cuándo le pondrán atención las autoridades a otros productos que están al alcance de los menores, por ejemplo, los periódicos que muestran fotografías de asesinatos con encabezados de burla.
En fin, cada vez se vuelve más necesario que participen en el debate personas que conozcan de videojuegos, no solo que supongan su funcionamiento.
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