Compartir

Hasta el momento, ¿de qué iría la próxima consola de Xbox?

Como lo hemos mencionado en otras ocasiones, aún no termina una generación de consolas cuando todo el mundo ya está esperando otra, ¿por qué? Es una necesidad (o necedad) de poner a las consolas en el mismo tren tecnológico de un Smartphone el cual se renueva cada año y termina costando el doble o, a veces el triple. Durante E3 2018, Microsoft lo dijo a los cuatro vientos, trabajan en una nueva consola y el nombre clave es Project Scarlett. ¿Cómo será el próximo Xbox?

Fuera de esta información, no ha surgido un comunicado o fuente oficial al respecto. Sería a través de una presentación oficial en un evento con su respectivo stream a través de mixer o durante el E3 2019 cuando podría presentarse la ocasión en que Microsoft más detalles reales sobre su próxima consola. Lo que venga después será solo un rumor, sin embargo uno a tomar en cuenta.




Entonces, ¿qué se puede decir del Xbox Project Scarlett?

El nombre clave en estos momentos es Project Scarlett. Sí, muy parecido a Scorpio (Xbox One X). Obvio, este no será el nombre final, sin embargo, es un título rimbombante para identificar a la nueva consola.

Ahora bien, el nuevo hardware podría tener un sinnúmero de nombres: Xbox Two, Xbox Zero, Xbox Infinite o cualquier cosa. Es difícil suponer un nombre en estos momentos cuando Microsoft no ha usado apelativos más básicos. Es más, podríamos apostar a que seguirían una estrategia parecida a los bautizos de Nintendo (GameCube, Wii, Wii U, Switch).

Phil Spencer habló sobre el futuro de Xbox en el E3 2018 durante la conferencia de prensa de Xbox. Él mencionó que la compañía está trabajando en al menos más de una consola.

“Nuestro equipo de hardware está inmerso en el desarrollo de la próxima generación de consolas Xbox, donde una vez más cumpliremos nuestro compromiso de establecer el punto de referencia para los juegos de consola”, dijo Spencer en la conferencia.

Ahora, se dice que Elder Scrolls 6, Cyberpunk 2077 y Halo Infinite estarían disponibles en PS5 y Xbox Project Scarlett.

¿Qué clase de pretenciosas especificaciones técnicas ofrecería el Project Scarlett?

Tanto el Xbox One como el PS4 funcionan con un CPU AMD Jaguar el cual permite que cada título pueda correr mínimo a 30 cuadros por segundo. Ahora, gracias a la mayor potencia en su GPU, tanto el PS4 Pro como el Xbox One X pueden ofrecer mejor rendimiento y definición en los títulos. Vale la pena recordar lo que Xbox piensa del tema de los frame rates y los tiempos de carga: “Creo que la velocidad de frame rates es un área donde las consolas pueden hacer más”, dijo Phil Spencer. “Cuando observas el equilibrio entre la CPU y la GPU en las consolas actuales, están un poco fuera de sintonía con respecto a la PC”.

El tema de los inicios de carga también es muy controvertido, pues el Xbox One se toma mucho tiempo y no permite a los usuarios jugar hasta que la descarga no está completa, cosa que casi no sucede con el PS4. Descargar y jugar es algo en lo que Microsoft ya está trabajando y que veremos pronto en las consolas actuales, sin embargo, el próximo hardware debería satisfacer sin problema estas necesidades.

Vaticinando algo más específico, lo ideal es que la siguiente generación de consolas soporte el 4K y los 60 cuadros por segundo de forma nativa y no a través de escalados que solo hacen la mitad del trabajo. Por esa razón el siguiente Xbox usaría gráficos GGDR6, lo cual sería un portento en potencia real por su velocidad. Así, los juegos correrían mucho más rápido y a resoluciones más dignas.

¿Uso de la nube?

Microsoft ha presumido durante años el uso de la nube desde el apartado de los negocios y computación básica hasta los mismos videojuegos. En su momento lo llamaron “Rocket Science”, sin embargo, hasta la fecha, no lo han demostrado todavía. Crackdown 3 supuestamente sería ese el ejemplo perfecto de combinación entre Xbox One y Azure. Ahora, de acuerdo a múltiples rumores, habría dos nuevos Xbox: uno “convencional” como cualquier otra consola, pero con mucha potencia y otra que use la nube para jugar y con un costo menor.

La idea de una consola dedicada para el streaming no es tan descabellada siempre y cuando exista una conexión digna y el hardware para apoyar el procesamiento. Si a eso sumamos Xbox Game Pass, entonces tenemos un Netflix de videojuegos en forma. Phil Spencer ha defendido a capa y espada el tema del streaming, entonces, si viene una del mandamás de la división de videojuegos de Microsoft, entonces podría ser una realidad.

Los videojuegos son parte del capitalismo y es necesario pensar en el probable precio de la consola

Un elemento clave para la adquisición de una consola nueva es el precio. Eso le afectó mucho a Xbox One durante su lanzamiento pues llegó a costar 499 dólares (tomando en cuenta que venía con Kinect). El PS4 en su momento costó 399 dólares lo cual fue clave para comercializar la consola (además del tema del préstamo de los juegos). Hagamos la necesaria comparación de precios: Xbox One X tiene un precio de 499 dólares, mientras el PS4 Pro tiene un costo de 399 USD, el PS4 Slim vale 299 USD y el Xbox One S cuesta 279. Tomando en cuenta que el Xbox One X es lo más potente, tal vez no suene tan mal pensar en los 499 dólares en un par de años más. Claro, estas son meras especulaciones. Un precio más elevado sería letal, especialmente si la oferta de PlayStation es menor, al igual a la de Nintendo.

Cualquier cosa puede pasar. Tres tipos distintos de consolas con configuraciones de acuerdo a las necesidades del consumidor, dos proyectos distintos, uno más tradicional que el otro. Aún es pronto, sin embargo, ya podemos darnos una ligera idea de lo que viene.